Los socialistas entienden que uno de los propósitos de los atentados del 11 de septiembre en Estados Unidos era provocar una reacción de los agredidos que condujera al conflicto, no sólo entre naciones, sino también entre culturas.

Según el PSOE,la respuesta a esos actos criminales debe dirigirse únicamente contra sus autores y contra quienes les amparan o cobijan, y no contra los miembros de las comunidades musulmanas.

Es más, el PSOE afirma que es responsabilidad de los poderes públicos emprender actuaciones que eviten el enfrentamiento cultural o religioso y planear proyectos "pedagógicos" sobre las acciones de lucha antiterrorista.

En consecuencia, dice el texto socialista, "es hoy más necesario que nunca abandonar la ignorancia y eldesprecio de los valores culturales del Islam y facilitar gestos que eviten en la población española la posibilidad de actitudes integristas o xenófobas".

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunió ayer mismo con representantes de la comunidad musulmana en España, que pidieron su mediación para reclamar más atención del Gobierno a sus problemas.

Fruto de ese encuentro ha sido la presentación de la proposición no de ley citada, en la que los socialistas piden contactosdel Gobierno, las Cortes Generales y los poderes públicos en general con la comunidad musulmana.

Esos contactos deben incluir visitas a centros religiosos y lugares de culto islámicos, promover el conocimiento de los valores de la religión musulmana y evitar por todos los medios actitudes xenófobas o racistas.