La querella de Denaes acusa a los responsables de Esait (organización que reivindica una selección de fútbol en Euskadi) y de Catalunya Acció (entidad que promueve lo mismo en Cataluña) de haber incurrido en los delitos de provación al odio, ultrajes a la nación española e injurias al Rey al promover la pitada al himno nacional, delitos para los que la pena máxima es de cinco años de cárcel.

El presidente de Denaes, Santiago Abascal, explicó a la salida de la Audiencia Nacional que la querella no va dirigida contra toda la hinchada del Bar‡a y del Athletic de Bilbao, a las que calificó de "masa vociferante del campo", sino contra las personas de Esait y Catalunya Acció "que promovieron e instigaron" la pitada al himno.

Según consta en el texto de la querella, Denaes considera a Esait y Catalunya Acció promotores de la pitada al himno y al Rey por el manifiesto conjunto que hicieron público unos días antes del partido, en el que llamaban a boicotear los actos previos al encuentro.

Mientras en el caso de Catalunya Acció la querella va dirigida contra su presidente, Santiago Espot, en el caso de Esait el escrito no concreta quiénes son sus responsables.

El responsable de la fundación considera que con la querella defienden "el sentimiento de miles de españoles que se sintieron gravísimamente ultrajados por lo sucedido en Mestalla", algo que, a su entender, provocó una "gravísima alarma social" en España y creó "expectativas en el ámbito secesionista".

"No venimos a defender las esencias patrias", dijo Abascal rodeado de simpatizantes de su fundación. El presidente de Denaes aseguró que el objetivo de la querella es defender todo lo que la bandera española y el himno nacional "evocan".

Para él, la bandera "no es un trapo de unos simples colores" ni el himno es "una simple melodía", sino que representan "la convivencia democrática de todos los españoles, el marco de libertades y nuestro devenir histórico"

El delito de injurias al Rey está castigado con sanciones que van desde los seis meses hasta los dos años de cárcel, el delito de incitación al odio prevé penas de un a tres años de prisión, mientras que el delito de ultrajes a la nación española esta penado con multas por un periodo de seis a doce meses.