Vera declaró a la Ser que Roldán le guarda rencor porque él mismo pidió su cese como director de la Guardia Civil cuando ambos eran altos cargos de Interior, "cosa que desgaciadamente no se hizo en su momento".

Roldán declaró ante el juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez de Liaño que tras el secuestro y asesinato de los etarras Lasa y Zabala estaban los antiguos guardias civiles del cuartel de Intxaurrondo Enrique Dorado y Felipe Bayo y que el propio Vera y el abogado Jorge Argote le pidieron que organizase un grupo para eliminar a estos guardias civiles, ya que sabían demasiado.

Vera negó tajantemente que él hubiera intentado eliminar a Dorado y Bayo. "En losaños en los que he tenido responsabilidades en la seguridad del Estado, a lo que me he dedicado es a proteger la vida no sólamente de todos los ciudadanos, sino especialmente de los guardias civiles y de las Fuerzas de Seguridad del Estado", afirmó.

El ex alto cargo de Interior dijo no saber si Dorado y Bayo tuvieron algo que ver en la desaparición de Lasa y Zabala, aunque opinó que "no creo que tengan nada que ver. Son dos guardias civiles, por lo que conozco, que se han dedicado con esfuerzo, con deicación y riesgo de sus vidas a combatir el terrorismo".

Vera dijo no conocer personalmente a ambos guardias civiles, "Quizá en alguna visita en mis tiempos de responsable de la Seguridad del Estado a Intxaurrondo haya podido conocerles, pero no les recuerdo ahora mismo, no les conozco".

A juicio del ex secretario de Estado para la Seguridad, "la justicia hace bien en profundizar en la investigación (sobre el 'caso Lasa y Zabala') y con el mismo esfuerzo debería profundizar también en la investigción de los dos inspectores de policía que desaparecieron hace algún tiempo en el sur de Francia y que hasta ahora no conocemos ni su paradero ni las circunstancias de su desaparición".