Así lo aseguró en la rueda de prensa posterior a su reunión con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Paje, donde subrayó el compromiso del Gobierno “en su conjunto” con el sector ganadero.

“El Gobierno de coalición goza de buena salud y, si lo sometemos a examen, aprueba con muy buena nota. Está respondiendo a las necesidades de la ciudadanía y haciendo posible que la recuperación llegue a todo el mundo, más allá del ruido que a veces se genera de forma desmesurada”, afirmó Sánchez.

En este sentido, la ministra pidió “huir del ruido excesivo” en torno a una “polémica de la que se ha hablado demasiado y muchas veces sin conocer y haciendo interpretaciones sesgadas de la entrevista” de Garzón.

“Nos tenemos que acostumbrar a que en los gobiernos de coalición las cuestiones se debaten y no siempre hay una postura inicial común”, prosiguió Sánchez, quien insistió en que el posicionamiento del Gobierno sobre esta materia es “inequívoco”.

Garzón aseguró hace dos semanas en una entrevista a ‘The Guardian’ que las explotaciones extensivas y familiares son sostenibles, pero que “lo que no es sostenible en absoluto son las llamadas macrogranjas”, que “encuentran un pueblo en un rincón despoblado de España y meten 4.000, o 5.000, o 10.000 cabezas de ganado. Contaminan el suelo, contaminan el agua y luego exportan esta carne de mala calidad procedente de estos animales mal tratados”.