Las jornadas de hulga elegidas por los sindicatos (21, 23, 28 y 30 de diciembre y 7 y 8 de enero) corresponden todas ellas a días de alto tráfico de viajeros.

Según Renfe, la enorme afluencia de viajeros que en esos días toman el tren para iniciar o finalizar sus vacaciones de Navidad ha obligado a fijar unos servicios mínimos que garanticen el derecho a la movilidad de todos los españoles.

Los paros de los días 21, 23, 28 y 30 de diciembre serán de cuatro horas por turno, desde las 0 a las 4 horas, desde las 7 hata las 11 horas y desde las 17 hasta las 21 horas. Por su parte, la huelga de 24 horas convocada para los días 7 y 8 de enero comenzará a las 15 horas del 7 y finalizará a las 15 horas del 8.

Renfe garantiza la circulación de los siguientes servicios mínimos:

- En Cercanías, el 75% de los servicios en las horas punta y entre el 50 y el 65% de los trenes en las horas valle.

- En Regionales, los días 21 y 28 de diciembre circularán 237 servicios, mientras que los días 23 y 30 lo harán 231 trens durante los intervalos de tiempo elegidos por los sindicatos para la huelga. Durante el resto del día circularán todos los trenes regionales que no se vean afectados por los horarios de huelga.

- En Grandes Líneas, circularán entre 89 y 110 trenes diurnos y entre 40 y 47 trenes nocturnos los días 21, 23, 28 y 30 de diciembre. Desde las 15 horas del día 7 de enero circularán 69 trenes diurnos y 44 nocturnos, mientras que el día 8, hasta las 15 horas, circularán 58 trenes diurnos.

Por su parte, e Comité General Intercentros de Renfe denunció hoy en un comunicado que los servicios mínimos establecidos por el Gobierno son abusivos y "un claro atentado al derecho constitucional" de los ferroviarios a realizar huelga.

A juicio de los sindicatos, el Gobierno hace una utilización torticera de la Constitución a la hora de aplicar servicios mínimos, garantizando los intereses económicos de la empresa y, al mismo tiempo, violentando los derechos fundamentales de los trabajadores.