La compañía encabeza así la lista de los ocho operadores beneficiados con un total de 26,1 millones de euros en fondos europeos, como se recoge en la resolución publicada este viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Un total de 9 de operadores, entre ellos Renfe, solicitaron la concesión de estas ayudas, que finalmente han sido propuestas a 8 de ellos porque uno no ha cumplido los criterios establecidos para el cálculo de las subvenciones.

Estas ayudas, concedidas sobre los tráficos de mercancías de 2022 y que oscilan entre los 275.000 euros y los 13,7 millones, persiguen incentivar el uso del transporte de mercancías por ferrocarril “premiando el ahorro de costes externos medioambientales y socioeconómicos generados por su uso frente a la carretera”. La cuantía de las ayudas depende de la evolución de la actividad de las empresas, el tipo de tracción de las locomotoras y la ocupación de los vagones de carga.

El programa de eco-incentivo ferroviario persigue un triple objetivo, según el Gobierno. Consolidar e incrementar la cuota del ferrocarril como alternativa en el transporte de mercancías, ayudar a los operadores ferroviarios a aumentar sus tráficos. “Haciendo más atractiva la oferta ferroviaria”, y mejorar su desempeño medioambiental, “incentivando que se priorice el uso de sistemas de tracción eléctricos”.

Los operadores podrán aprovechar las subvenciones para, por ejemplo, reducir tarifas o mejorar la calidad de los servicios, “lo que redundará en beneficios palpables para los cargadores y el resto de la cadena multimodal”.

Cabe recordar que el ferrocarril emite aproximadamente ocho veces menos emisiones directas de gases de efecto invernadero que la carretera en pauta no urbana y catorce menos que el avión.