Ortiz se refirió a esta cuestión en la Comisión de Interior del Congreso, a donde acudió a explicar las cuentas de las prisiones para 2023.

En esta comparecencia, la diputada del PP Isabel Borrego y la de Vox María Teresa López plantearon la cuestión de que los jueces estén anulando decisiones del Gobierno vasco sobre presos de ETA, que se producen después de que el Gabinete de Urkullu asumiera en octubre de 2021 el control de las cárceles de esta comunidad.

A este respecto, Ortiz afirmó que “la ley y la prisión se cumplen igual en Jaén, en Soto o en el País Vasco” y que en este ámbito hay que ser “muy rigurosos” y “hablar con datos”.

NIEGA UN “PLAN OCULTO”

En este sentido, señaló que, en lo que se refiere a los traslados de presos etarras al País Vasco decididos por Interior, “no valen las insinuaciones ni los bulos”. Así, negó que el Ministerio pueda “imponer” que se lleve a un recluso a otra cárcel, puesto que esto es algo que deciden las juntas de tratamiento, que son órganos “colegiados” cuyos acuerdos están sometidos al control judicial.

Añadió que el Gabinete de Pedro Sánchez está aplicando, respecto al traslado de presos etarras, “la misma ley y el mismo reglamento” que usó el PP cuando estaba en el poder.

Además, negó que exista un “plan oculto” que ligue decisiones sobre los presos con los Presupuestos del Estado, en referencia a que el movimiento de reclusos etarras tenga que ver con una reclamación de EH Bildu para apoyar las cuentas públicas.

Sobre la anulación de terceros grados, Ortiz señaló que desde 2018 se han tomado 29 decisiones en este ámbito y que sólo tres han sido revocadas por los jueces. También aludió a que Instituciones Penitenciarias rechazó un tercer grado que luego fue concedido por la Audiencia Nacional.

Por su parte, la diputada de Vox María Teresa López estimó una “vergüenza” que la Fiscalía esté recurriendo terceros grados dados por los Gobiernos central o vasco a presos de ETA. Añadió que los pactos de Sánchez con los “filoterroristas” de EH Bildu hace que la Administración penitenciaria nunca haya estado “tan desprestigiada”.