La entrega de las condecoraciones fue realizada durante el acto de imposición de fajas de Estado Mayor a los 66 oficiales de la promoción del 89 que completaron estos estudios, que también realizaba el comandante Villalobos cuando fe herido por el atentado terrorista y que no pudo finalizar.

El militar permaneció sentado en una silla de ruedas junto a sus compañeros de promoción durante el acto. Sin embargo, en el momento de recibir las condecoraciones, el comandante fue caminando ayudado con dos muletas hacia el lugar en el que se encontraba el rey, quien le impuso la faja de Estado Mayor y la cruz al mérito militar.

En ese momento, el comandante Villalobos no pudo reprimir unas lágrimas, ya que, según confesó posteriormene, "es triste recibir el doctorado de una carrera que desgraciadamente no vas a poner en práctica".

Cuando regresó a su silla de ruedas, el público asistente al acto castrense rompió en un cariñoso aplauso hacia el militar, "protagonista de excepción" de la jornada, según afirmó en su salutación el general director de la Escuela Superior del Ejército, José López Perea.

El general agradeció al comandante Villalobos el ejemplo dado a la sociedad al "soportar con singular entereza el zarpazo de la butal mutilación causada por la sanguinaria e inútil barbarie terrorista" y la lección "de fe, generosidad, bondad, capacidad de perdón y de firmeza y de deseos de vivir".

Por su parte, el director jefe de la Escuela de Estado Mayor resaltó, en la última lección del curso que impartió durante la ceremonia, las cualidades que deben tener los oficiales de Estado Mayor, entre las que citó la flexibilidad para adaptarse "a la actual época de crísis, en la que se llega a poner en tela de juicio la razón de er de los Ejércitos".

Tras la ceremonia de entrega de los diplomas y las fajas de Estado Mayor, en la que estuvo presente, entre otros, el ministro de Defensa Julián García Vargas, el acto se transformó en una recepción informal en la que el rey Juan Carlos felicitó a los condecorados, entre ellos el comandante Villalobos, a quien dijo,según el propio comandante,"que siga adelante y que ha tenido mucha fuerza moral para poder volver a andar".

Asimismo, el monarca saludó a los presentes, entre ls que se encontraba un grupo de periodistas. Uno de ellos preguntó al monarca sobre su salud, recordándole que en otra ocasión, ante una pregunta similar, respondió "a la gallega".

Don Juan Carlos respondió bromenando "¿qué quieres que te conteste, lo mismo?", a lo que añadió en tono irónico y dirigiéndose al resto de periodistas "vosotros escribid".