Así se rindió homenaje a Antonio Hernández Gil (presidente de las Cortes en la Legislatura Constituyente); Fernando Álvarez de Miranda (Legislatura Constituyente); Landelino Lavilla (I Legislatura); Gregorio Peces-Barba (II Legislatura); Félix Pons (III, IV y V Legislaturas); Federico Trillo (VI Legislatura); Luisa Fernanda Rudi (VII Legislatura); Manuel Marín (VIII Legislatura); José Bono (IX Legislatura); Jesús Posada (X Legislatura); Patxi López (XI Legislatura) y Ana Pastor (XII Legislatura), algunos de los cuales estuvieron presentes.

En el acto también estuvieron, además de la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), el vocal Rafael Mozo; el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños; así como la presidenta del Consejo de Estado, Magdalena Valerio; la presidenta del Tribunal de Cuentas, Enriqueta Chicano; el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo; y el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas.

Don Felipe recordó en su discurso que con las medallas entregadas "se distingue y valora el trabajo, esfuerzo y determinación de todos los expresidentes, desde los que estuvieron en aquel excepcional comienzo, hasta los que continuaron trazando y fortaleciendo el camino del parlamentarismo hasta nuestros días".

"Todos ellos son ejemplos de servidores públicos que, desde la presidencia, supieron anteponer a cualquier otra preocupación la tarea prioritaria de asentar nuestra vida colectiva sobre las bases del respeto mutuo y el aprecio por el diálogo constructivo y el debate razonado. Su memoria forma parte de lo mejor de nuestra historia reciente", agregó el Rey, quien tuvo un recuerdo especial para Landelino Lavilla por preservar "con su actitud firme la dignidad del Parlamento frente al intento de ruptura del orden constitucional", con el intento de golpe de Estado de Tejero.

"He tenido la fortuna de conocerlos a todos, incluso a algunos siendo un niño. Y hemos compartido muchos acontecimientos cruciales para España, y que considero, como todos aquí, momentos igualmente fundamentales para mí. Y volver al Congreso, por tanto, significa evocar esas fechas, especialmente las que han marcado más mi vida y mi trayectoria, y que también vinculan mis recuerdos a los de los homenajeados", resaltó el Monarca.

Recordó, en este sentido, cuando juró la Constitución como Rey, hace nueve años, y cuando antes lo hizo como Príncipe de Asturias, el 30 de enero de 1986, "acto debido y solemne que volveremos a vivir con la Princesa Leonor ante su mayoría de edad".

BATET

La actual presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, dijo en su discurso que en las democracias todos los ciudadanos cuentan por igual y afirmó que “tras los logros y las metas” hay “esfuerzos colectivos que no pueden reducirse a capacidades individuales”, y las instituciones son las ”catalizadoras de esa voluntad colectiva de alcanzar cotas más altas de bienestar”.

Batet aseguró que esa tendencia “reacia a la personalización se proyecta en la vida parlamentaria” en España, donde, a diferencia de en otros países, no se suelen conocer las leyes por el nombre del diputado que la impulsó. No obstante, también detectó “hitos que dan identidad a la legislatura” a veces protagonizados por el presidente del Congreso.

A todos sus predecesores les reconoció haber “dejado su impronta en la forma de ejercer el cargo” sobre los pilares de independencia y autonomía. Alternando palabras propias con otras de algunos de ellos, apuntó que que ser el presidente de todos los diputados no puede suponer tampoco aceptar las pretensiones de todos”, sino que “el pluralismo político encuentre cobijo y cauce real de expresión” en la Cámara.

“Cuenta más la legitimidad de ejercicio que la de origen”, añadió, reconociendo a sus predecesores haber “velado siempre por el prestigio de la institución”. Constató, en este sentido, que ”lo más exigente” del cargo es “la dirección de los debates parlamentarios”.

Respecto a ellos, postuló que la libertad de palabra debe estar “al servicio del debate razonado y contradictorio”, pero también hay que poner “ciertos límites a lo que se puede decir y al modo en que se dice”, porque “las formas son esenciales en una democracia parlamentaria” y “perder las buenas formas es perder las buenas razones”.

Finalmente, calificando de “importante” el acto de hoy, señaló como pilares de la democracia el mantenimiento de ciertos consensos “transversales”, el “respeto a la verdad” y “el fortalecimiento de los lazos de solidaridad y empatía”, con el Parlamento como “la pieza fundamental” y el “centro político de la nación”.

EX PRESIDENTES

El primero de los ex presidentes en tomar la palabra fue Federico Trillo, quien elogió a Batet y a la actual Mesa del Congreso por crear este premio, ya que "honrar el pasado sin banderías, sin mirar atrás con ira, dignifica el presente y también hace más digno el futuro". De la misma manera se manifestó Luisa Fernanda Rudí, quien también felicitó a Batet por la condecoración y recordó que "la democracia se gana pero hay que mantenerla".

José Bono glosó la figura de don Felipe, de quien dijo que es "un Jefe de Estado prudente y honrado" y rememoró la primera vez que tuvo que hablar con él y "me temblaban las rodillas. Ahora no, porque sé que se le puede hablar y que siempre escucha". Se refirió a los retratos circulares que hay en la Cámara Baja, de "diputados ilustrados" y que "hoy ya importan poco. Dentro de 100 años otros españoles, hijos de nuestros nietos, nos verán iguales. No nos recordarán por las ocurrencias que nos hemos lanzado ¿verdad, Federico?", dijo, refiriéndose a Trillo, e invitó a todos los políticos a ser menos beligerantes para que "no sea necesario morirse para que los políticos convivamos pacíficamente, de forma póstuma".

Por su parte, Jesús Posada subrayó que cuando ostentó la presidencia de la Cámara se preocupó "porque todos los grupos pudieran hacer sus propuestas, llevarlas a la discusión y visibilizarlas por toda España, para que este Congreso fuera un reflejo de la política de España".

Patxi López prometió ser “tan breve” como lo fue su mandato, de enero a julio de 2016. Recordó que con él como presidente irrumpieron nuevos partidos y se crearon nuevos hábitos parlamentarios, con “teatralizaciones dignas del mejor Broadway”, en clara referencia a Unidas Podemos, sobre quienes también bromeó a Bono: “Pepe, te hubieras hinchado a repartir corbatas”.

Recordó también que, en su legislatura, inicialmente no hubo candidato a la investidura; aludió así, sin mencionarlos, a que Mariano Rajoy se resistía a presentarse para no salir elegido y no empezó a correr el plazo de dos meses para repetir elecciones hasta que lo hizo Pedro Sánchez, también rechazado. “Y eso no lo hemos resuelto. Espero que no lo lamentemos”, emplazó ante las elecciones del 23 de julio.

Ana Pastor agradeció al Rey el afecto y el amor que tiene a la institución, "un afecto cultivado" que ha sembrado para la Princesa Leonor, "que seguirá vuestro ejemplo", y recordó que en el Parlamento "es donde se defienden y se consagran los derechos y libertades de los españoles". Este acto, proclamó, es una homenaje a nuestra democracia, "expresión de la voluntad ciudadana, apoyada en los sólidos cimientos que nos provee nuestra Constitución".