Así lo indicó Rufián tras la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ante el Congreso para informar de los últimos acuerdos alcanzados en el seno del Consejo Europeo, donde coincidió con él en que el “tsunami y el apocalipsis que la derecha vaticinó no ha llegado”, pero señaló q es “cierto” que frente a esa “amenaza falsa simplemente se dedicó a repartir paraguas”.

Asimismo, Rufián dijo que la pregunta ya no es si este es el último año de legislatura, sino si será el último año de este Gobierno “tal y como conocemos” y la respuesta es que “depende”, pero lo que está “claro” a, su juicio, es que el “propio” Ejecutivo está “comprando papeleteas para que así sea”.

En este sentido, destacó que mientras la gente de España “almuerza y come cada día con una guerra judicial diferente, con unas mentiras en la tele diferentes y con una manifestación de fachas en la calle diferente” la respuesta de cualquier Gobierno que tenga “cierta autoestima de izquierdas” no puede ser “tan rácana y tan temporal”.

Sobre las medidas del plan anticrisis del Gobierno, Rufián destacó que bajar el IVA de los alimentos “indiscriminadamente” sin topar precios y sin gravar beneficios lo único que consigue es que el Estado “no pueda recaudar” y que los beneficios de grandes supermercados “aumenten”.

Por ello, apostó por bajar precios y gravar beneficios. “A esto nos referimos cuando hablamos de medidas valientes y en el tiempo”. También afirmó que está “muy bien” que Sánchez en Davos parezca el “Che Guevara con corbata”, pero le trasladó tres cosas para que la próxima vez que vaya allí “las pueda reivindicar más allá de discursos”.

Estas propuestas son una subida del Salario Mínimo Interprofesional hasta los 1.100 euros, una reforma fiscal “real” y una Ley de Vivienda “efectiva”. En este aspecto, deploró que Sánchez se reuniera en Davos con uno de los “mayores desahuciadores” de ese país, el “CEO de BlackRock” y esperó que no tenga “nada que ver con las reticencias que tiene el PSOE a aprobar según qué cosas de la Ley de Vivienda”.

DERECHA

En su discurso, Rufián apuntó que lo “realmente importante” no son las “amenazas” al Gobierno, sino a la democracia, y preguntó si en España se verá un “asalto” al Congreso, al Senado y a cualquier cámara parlamentaria. La respuesta, a su juicio, es que es “simplemente cuestión de tiempo” porque la democracia “necesita de buenos ganadores” y de “buenos perdedores”.

Según Rufián, la derecha “ha demostrado que tenga la bandera que tenga jamás sabe perder” y cree que “los países son suyos”. Al respecto, comentó que un ejemplo en España de los “ataques” de la derecha es “el ataque de las derechas al derecho al aborto”, haciendo alusión a la propuesta de Vox en este sentido en Castilla y León.

Sobre este tema, Rufián aclaró que el derecho al aborto forma parte del “núcleo” de la democracia y del “laicismo de cualquier Estado de derecho”, así como que los derechos “no obligan”, que el derecho al aborto “no te obliga a abortar”, sino que “son las derechas las que obligan”.

“Cuando a la derecha le importa muchísimo el latido de un feto no nacido y muy poco las condiciones de vida de un menor abandonado que ha llegado en patera o en los bajos de un camión, lo que demuestra es que su única religión es el dinero y que su única patria es el mercado y que son unos hipócritas”, añadió.

Finalmente, recordó que 2023 es un año electoral y preguntó si habrá una segunda oportunidad para hacer “cuanto debemos hacer” y la respuesta es que no lo sabemos, así que “intentemos aprovechar el tiempo”. Como ejemplo puso los presupuestos de Cataluña, que no se han aprobado aún por discrepancias entre ERC y el PSC. En este sentido, comentó que no tener presupuestos afecta a ERC, al PSC y también “a la gente”.