Así lo dijo en respuesta a la intervención de un accionista durante la junta general de accionistas de la compañía, en la que Manrique subrayó que el nuevo plan estratégico se centrará en el sector del agua, las infraestructuras de transportes y sociales, y los países de habla inglesa.

“La retribución del accionista será uno de los pilares del nuevo plan estratégico”, dijo el consejero delegado, que precisó que, en un contexto en el que la compañía tenía una situación “más débil”, decidieron dedicar “todos los recursos de caja a invertir en concesiones para crear valor”. “Creo que ha sido una decisión acertada”, señaló.

Los accionistas aprobaron en la junta dos nuevos dividendos por un máximo de 20 millones de acciones de valor nominal cada una a ejecutar en 2023 y 2024. “La rentabilidad anual por dividendo será del entorno del 5%”, dijo el consejero delegado durante su discurso.

En cuanto al valor de la acción, señaló que la compañía va por el “camino adecuado” para alcanzar un valor de cuatro euros y destacó que, desde el anuncio del plan de desinversiones en el mes de octubre, la acción ha subido un 46%. Así, dijo que espera alcanzar “a medio plazo” ese valor gracias al foco en los activos concesionales que incrementan su valor “constantemente”.

Asimismo, descartó que se pudiese producir una OPA sobre la compañía, dado el valor que ha alcanzado ya la acción, aunque subrayó que, de producirse, el consejo de administración actuará en defensa de sus “intereses” y del “interés social de la compañía”.

Manrique también confirmó que el Consejo de Administración ha asumido el compromiso de dividir en dos las funciones ejecutivas en 2025, lo que le llevará a dejar su cargo de consejero delegado. Ante las reclamaciones de un accionista de que el nuevo CEO provenga de la promoción interna de la empresa, Manrique indicó que “la mayoría de los accionistas lo verán con buenos ojos”, pero no confirmó su procedencia.

Preguntado por el conflicto que mantiene la empresa por las obras del Canal de Panamá, resaltó que esta cuestión “ya no es un problema de esta compañía” y, “al igual que Repsol”, ya es “historia pasada”. “No nos afectará ni a la caja ni a las cuentas”, dijo Manrique, quien señaló que, respecto a la resolución de los conflictos activos, hay posibilidades “siempre de sumar, no de restar”.

Los accionistas aprobaron todos los puntos del día, incluyendo la renovación como consejero de Manuel Manrique, por un periodo de cuatro años, y el nombramiento de Elena Monreal Alfageme y Adriana Hoyos Vega como nuevas consejeras independientes.

Asimismo, se votó afirmativamente el nombramiento de José Manuel Loureda Mantiñán como consejero dominical y la renovación como consejera independiente de Elena Jiménez de Andrade Astorqui. Isabel Martín Castella finaliza su mandato y seguirá como patrona de la Fundación Sacyr.