Así lo dijo durante el acto organizado por el PSOE con motivo del 25N, Día Internacional contra la Violencia de Género, en el que alabó que la conocida como 'Ley del solo sí es sí’ es un norma “importante en la lucha de la historia de las mujeres” y tiene el “único cometido de reforzar la seguridad de las mujeres para que nunca más un víctima mujer sea cuestionada”.

Es una “ley pensada para proteger a las mujeres, que va a proteger a las mujeres, una ley pionera, a la vanguardia, necesaria y que pone el consentimiento en el centro de las relaciones entre el hombre y la mujer”, expresó Sánchez después de conocerse, a las que él mismo se refirió, las decisiones de algunos jueces de avalar las rebajas de penas aplicando esta ley, contra el criterio marcado por la Fiscalía.

"Como presidente del Gobierno, creo que es importante esperar a que se pronuncie el Tribunal Supremo para que se unifique toda esa doctrina y, garanticemos entre todos la seguridad de las mujeres".

De hecho, el propio Sánchez, en una conversación informal con periodistas lo fio todo a la decisión que tome el Supremo en la revisión de las condenas del 'caso Arandina' , cuyas deliberaciones empezaron ayer y se esperan que concluya la próxima semana. El jefe del Ejecutivo se mostró seguro de que la decisión del Supremo enmendará la polémica por las revisiones de las penas a condenados por abusos sexuales en aplicación de la nueva norma.

Sánchez recordó que hay jurisprudencia sobre el periodo de transición de una ley a otra que les invita a pensar que la decisión del Supremo con la unificación de doctrina irá en línea con la posición tomada por la Fiscalía.

En el acto, organizado en el marco del XXVI Congreso de la Internacional Socialista en Madrid, el presidente apeló directamente a “todos los hombres” a dar “un paso al frente” en la lucha feminista y a “aprender” de la mano de las mujeres a “dejar de ser machistas”.

"Dejemos de encubrirnos, de restar importancia, de pensar que no hay motivos, dejemos de quejarnos de que quizás exageran, de hacer chistes sobre su lucha, de decir que son pesadas, de mirar hacia otro lado", espetó Sánchez, porque "no basta con decir yo no soy machista, no basta con creer que no lo somos, no basta con guardar silencio y estarse quietos, ni siquiera basta con asentir cuando nos hablan del tema".

En su discurso antes de asumir la Presidencia de la Internacional Socialista, Sánchez sostuvo que "para dejar de ser machista hay que aprender, y dejemos que nos enseñen las mujeres a no serlo", y alertó de los retrocesos en Estados Unidos con el aborto, de la revolución de las mujeres en Irán o de la "oscuridad" en la que están las mujeres en Afganistán.

El líder socialista denunció que "las mujeres siguen en peligro" en la "intimidad" y alertó sobre la necesidad de tomar conciencia de la violencia de género porque "no son solo unos números en el Telediario, sino una trágica realidad sangrienta". "A mí me avergüenza como hombre cómo se perpetran tantos casos de violencia contra la mujeres", aseguró, y animó a los hombres a dar "un paso adelante" porque "la violencia machista es una sombra, alargada y escurridiza".

Previamente, la secretaria de Igualdad del PSOE y diputada por León, Andrea Fernández, y Janet Camilo, la recién elegida secretaria general de la Internacional Socialista de Mujeres, mantuvieron un diálogo en el que instaron al hombre a caminar con la mujer para erradicar esta violencia.