Su ejecución, además de haberse realizado con materiales que respetan “rigurosamente” el medio ambiente y de guiarse por un plan integral de gestión de la calidad ambiental, incorporó todos los requisitos de diseño y construcción para conseguir la certificación LEED Gold, una distinción ambiental que reconoce las mejores prácticas en cuanto a estándares de ecoeficiencia.

Por otra parte, la ejecución de su fachada fue llevada a cabo por García Faura Arquitectura y en ella Saint-Gobain Glass participó con 1.400 m2 de su doble acristalamiento Climalit Plus con Cool-Lite SKN 154, un vidrio de alta selectividad con alto control solar y baja emisividad.

Según explican desde la compañía, se trata de una solución recomendada para su aplicación en grandes espacios acristalados, como en este caso, donde se reduce la demanda energética del edificio mientras se consigue una alta entrada de luz y se controla la entrega de energía solar.

Además, como solución de climatización, se instalaron 4.000 m2 de Climaver 360 Neto de Isover, un conducto autoportante de lana mineral que cuenta con la mejor clasificación de estanqueidad del aire ATC 1 y que garantiza un correcto aislamiento térmico y acústico en las instalaciones.