En comparativa interanual, el crecimiento del empleo se ha acelerado hasta el 2,71%, con 550.921 afiliados más que hace un año, según se desprende de los datos publicados este miércoles por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

Además, en el periodo enero-julio de 2023, la afiliación media ha crecido en 595.614 personas, la segunda mejor cifra en 16 años, solo por detrás de 2017.

Aunque la afiliación no ha logrado alcanzar la barrera de los 21 millones de ocupados, la serie diaria sí ha logrado rebasar, por segundo mes consecutivo, los 20,9 millones de trabajadores durante algunas jornadas. En concreto, lo hizo entre el 11 y el 27 de ese mes (en total, 17 días).

Por regímenes, el general ganó 26.991 cotizantes en julio, un 0,15%, hasta un total de 17.478.591, y en el último año sumó 547.364 afiliados (+3,23%).

Entre los sectores destaca la caída en educación, que perdió 110.705 cotizantes en julio, un descenso del 10,32% respecto a junio, siendo el sector que más retrocedió. La mayoría creció resaltando las actividades sanitarias y servicios sociales, con 49.346 personas (+2,71%); el comercio, que sumó 41.099 afiliados (+1,6%), y la hostelería, con 23.864 afiliados (+1,53%).

De su lado, el régimen de autónomos totalizó 3.344.562 afiliados, tras perder 6.819 personas en el mes, un 0,20%. En cambio, en el año sumó 3.617 ocupados (+0,11%).

La mayoría de actividades registraron descensos. La educación fue la que más perdió, restando 4.435 afiliados (-4,45%). Con signo contrario, la hostelería fue la que más cotizantes sumó de las cinco que lo hicieron con 2.000 afiliados más en el mes (+0,62%).

El régimen del mar registró 1.768 afiliados medios en julio (+2,68%) y dejó el total en 67.772 cotizantes. En el último año perdió nueve afiliados. Asimismo, el del carbón contabilizó 958 cotizantes, cuatro más que en junio y 52 menos que en julio de 2022.

DATOS DESESTACIONALIZADOS

En términos desestacionalizados, la afiliación ganó en julio 16.285 ocupados, hasta situarse en los 20.705.244. Además, en lo que va de 2023, la Seguridad Social acumula un incremento de 464.350 afiliados, el mayor crecimiento en el periodo enero-julio de la serie, con excepción de 2005.

Respecto al nivel previo a la pandemia (febrero 2020), la afiliación ha crecido en casi 1,3 millones de personas en términos ajustados, de las que tres de cada cuatro son en el sector privado.

En este sentido, Seguridad Social subraya que el crecimiento de la afiliación respecto al nivel previo a la covid-19 es especialmente intenso en sectores de alto valor añadido como informática y telecomunicaciones, cuyo número de afiliados ha aumentado un 23,7%, o actividades profesionales, científicas y técnicas, que presenta un crecimiento del 14%.

Desde el fin de la pandemia, uno de cada cuatro nuevos afiliados (286.000 en términos absolutos) se ha incorporado a estos dos sectores altamente productivos.

Además, en comparación con el nivel anterior a la pandemia, el empleo femenino también muestra un especial dinamismo. En concreto, la afiliación a la Seguridad Social de mujeres ha aumentado un 8,6%, que son 3,1 puntos más de lo que lo ha hecho el de los hombres.

Por su parte, el empleo juvenil ha crecido un 10,3% en comparación con los niveles previos a la pandemia, lo que supone 3,4 puntos porcentuales por encima de la media del resto de la población. Si se analiza desde diciembre de 2021, antes de la reforma laboral, el aumento del empleo entre los menores de 30 años es del 16,3%, el triple que el promedio de todas las edades (+5,4%).

En cuanto al tipo de contrato, el porcentaje de afiliados temporales se sitúa en el 15%, la mitad del que se registraba antes de la reforma laboral de diciembre de 2021 (30%).

En el caso de los menores de 30 años, la reducción de la tasa de temporalidad es más intensa, bajando en 28 puntos (del 53% al 25%) respecto al nivel que tenía antes de la reforma. En conjunto, ahora hay casi 3 millones de afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021.

Otro indicador del incremento de la estabilidad es el aumento de la duración media de los contratos que han causado baja. Entre enero y julio de este año, ha crecido un 33% en comparación con las cifras del mismo periodo de 2019, último año homologable anterior al impacto de la pandemia, mejorando los datos de 2022.

Por otra parte, el número de trabajadores en ERTE se mantiene en niveles mínimos, en el entorno de los 12.000 afiliados, y suponen el 0,1% del total.

Por último, Seguridad Social señala que “el fuerte dinamismo del mercado laboral y la mejora de la calidad del empleo está contribuyendo a reforzar la sostenibilidad del sistema de pensiones”, de forma que los ingresos por cotizaciones sociales han registrado hasta junio un crecimiento del 10%.

Mientras, la mejoría del empleo también impulsa la ratio cotizante por pensionista, que se sitúa en 2,4, máximos de la década.