Mediante un comunicado, el SEPLArecordó que el sector de las escuelas aeronáuticas se está viendo mermado durante los últimos años por el proceso de reducción de costes que afecta a todo el sector, con el consiguiente efecto que esto tiene en sus niveles de siniestralidad.

Una muestra de ello, según el sindicato, es la aplicación de políticas de personal basadas en prescindir de instructores con experiencia, sustituyéndolos por personal más joven y con menos horas de vuelo. El instructor fallecido esta mañana tenía sólo 21 años.

Paralelamente, los aeropuertos en los que desarrollan su actividad las escuelas se ven afectados por una congestión creciente en su uso, adoleciendo además de graves carencias en materia de control de tráfico aéreo, entre las que destaca el empleo de personal no profesional dedicado a estas tareas.

Finalmente, el sindicato expresó su conmoción por la desgracia y transmitió su más sincero apoyo a la familia de los fallecidos y de los otros dos heridos.