La victoria de los Steelers se cimentó ya en el primer cuarto, en el que lograron obtener una renta suficiente de puntos (13-20), que se amplió al descanso a 25-39, e incluso en algunos compases del encuentro la diferencia ascendió a los veintiún puntos.

El juego conceptual del conjunto de Sheffield se le atragantó al Fundosa ONCE, que veía que la defensa cerrada que practicaba la escuadra rival suponía un hándicap para que los pivots españole entraran en la zona. Además, el acierto en el tiro de los bases internacionales británicos Colin Price y Kevin Hayes y el oportunismo en los rebotes, tanto ofensivos como defensivos, del pívot Calum Gordon, unido a la descoordinación en los ataques y a algunas pérdidas de balón, hicieron que el Sheffield Steelers dominara el tempo del encuentro en los primeros veinte minutos.

Tras el descanso, la remontada del Fundosa ONCE, campeón de la Copa de Europa en 1997, no se hizo esperar. Poco a poco, el clu madrileño fue limando las diferencias en el marcador, con el estadounidense Jeff Glasbrenner asumiendo plenamente la responsabilidad del equipo en la dirección del juego y en los lanzamientos a canasta.

El último cuarto se inició con el marcador favorable a los británicos por 47-53. El Fundosa ONCE consiguió anular la diferencia de puntos, hasta igualar el encuentro a 66 puntos a falta de 41 segundos para el final, gracias a un tiro de dos y libre adicional convertidos por Glasbrenner.

Sin embaro, faltando doce segundos, el alero inglés David Bramley rompió el muro defensivo del Fundosa y logró colarse en la zona, con una canasta y tiro libre adicional que supusieron el 66-69 final.

"NERVIOS Y PRESIÓN"

A la finalización del encuentro, el entrenador del Fundosa ONCE, Juan Manuel Búrdalo, lamentó que sus jugadores no consiguieran "entrar en el partido" hasta la segunda mitad, debido, a su juicio, "a los nervios y la presión de tener que responder en casa y ante la afición" (las gradas del Paellón IFNI de Sevilla se poblaron de seguidores del club madrileño, que no cesaron de animar a su equipo durante todo el choque).

Glasbrenner terminó como máximo anotador del encuentro, con 24 puntos, además de capturar 11 rebotes. En el Sheffield Steelers, Gordon llegó hasta los 19 tantos y 13 rebotes, y Colin Pride y Bramley anotaron 15 puntos cada uno.

En la otra semifinal, el actual campeón de la liga italiana, el Anmic Sassari, se impuso al también club italiano del Tabú Cantú, por 92-73. Deesta forma, mañana la gran final la disputarán el Anmic Sassari, que cayó derrotado en la mañana de hoy ante el Fundosa por 81-55, y el Sheffield Steelers, que ya consiguió este título en 1994 y el año pasado, en Giulanova (Italia), conquistó el tercer puesto.

Por otra parte, en uno de los partidos de consolación, el Meaux francés, campeón de la Copa de Europa en los tres últimos años, ganó al ONCE Andalucía por 62-59. Los sevillanos dominaron durante los primeros treinta minutos, adquiriendo ventajasincluso que oscilaban en torno a los diez puntos.

En el último cuarto, la defensa presionante a toda cancha del Meaux se le atragantó al ONCE Andalucía, que veía además cómo sus dos mejores hombres, Lorenzo Envo y Diego de Paz, se cargaban con cuatro faltas personales (finalmente quedaron eliminados).

El ONCE Andalucía jugará mañana, a las 9:30 horas, el partido por el séptimo y octavo puesto contra el Antílope holandés, al que ya venció el viernes por un contundente 102-68. El quinto y el sexto uesto se lo disputarán el Meaux y el Zwickau alemán, que venció al conjunto francés esta mañana por 52-49. El Fundosa ONCE disputará el encuentro del tercer y cuarto puesto a las 11:15 horas, contra el Tabú Cantú de Italia.