"Por el sindicato Gestha son conocidos los sistemáticos ataques contra los delegados sindicales por parte de la Agencia Tributaria, lo cual supone una modalidad estudiada de 'mobbing', un ejercicio reiterado de discriminación, incumpliendo la normativa aplicable, privando a sus miembros de la produtividad que cobraban antes de ejercer tareas sindicales, poniendo innumerables trabas al reparto equitativo de medios para el desempeño de nuestras funciones como sindicato, y en muchos casos con valoraciones de trabajo desarrollado humillantemente bajas", señala Gestha en un informe remitido hoy a Montoro.

Para Gestha, es necesario reflexionar sobre la incidencia del acoso en el trabajo en el ámbito del Ministerio de Hacienda, y especialmente en la Agencia Tributaria. A juicio de este sindicato, el atual modelo de la Agencia Tributaria "crea el clima propicio para la aparición de situaciones de acoso".

Esto es así, según Gestha, porque el personal dirigente de la Agencia Tributaria "cuenta con instrumentos de autoridad tan poderosos como el reparto injustificado de cantidades variables de productividad entre los funcionarios a su cargo, o la valoración subjetiva del trabajo desarrollado, imprescindible para la promoción del personal o su traslado a otra localidad".

Además, añade Gestha, "el iseño de unos objetivos meramente nominales por parte de la dirección de la Agencia Tributaria como herramienta vertebradora de funcionamiento interno y la necesidad de cumplirlos 'a cualquier coste', y, en muchas ocasiones, en clara confrontación con la vocación de servicio público que debería ser propia de este organismo, acrecienta el peligro de que se produzcan estas prácticas" de acoso en el trabajo.

Gestha indica también que no hay que olvidar que los funcionarios encargados de la dirección y getión del personal en la Agencia Tributaria y en el Ministerio de Hacienda son funcionarios integrados en el Cuerpo de Inspectores de Hacienda del Estado o en el de Interventores y Auditores del Estado a los que "se les confiere un poder casi absoluto".

Según este sindicato, estos funcionarios se preocupan más por la consecución de los objetivos que por la adecuada resolución de conflictos laborales, de manera que cuando hay conflictos laborales las responsabilidades se diluyen entre los distintos estaentos jerárquicos, "generando en el acosado una sensación de indefensión insuperable".

En el informe remitido por el secretario general de Gestha, Joaquín del Moral Lucena, el sindicato recuerda a Montoro las graves consecuencias del "mobbing" para la salud de los afectados y para la economía del Estado, por el coste derivado de despidos y bajas, entre otros, e insiste en la necesidad de abordar una negociación sobre esta materia para combatir y prevenir el acoso en el trabajo dentro del ámbito de su epartamento.