En un comunicado conjunto, señalan que “llevamos tres años de retraso en los procesos de selección de personal” y el “número de 600 plazas” que avanzó este jueves Díaz “puede parecer muy redondo, pero no es más que el resultado de un fracaso en los procesos selectivos”.

“Lo que no dice la ministra es que este retraso se realiza sobre las espaldas de la plantilla actual, ya que en buena medida lo planificado desde Función Pública responde a las necesidades que han ido naciendo entre el personal Inspector y Subinspector como consecuencia de las bajas que se han ido produciendo en cada uno de los ejercicios”.

Los representantes de los trabajadores añaden que la ministra también se olvida de que en el apartado de personal técnico y administrativo, las necesidades mínimas diagnosticadas el pasado año por el propio ministerio para evitar el colapso en mucho de los servicios que tiene la obligación de garantizar en la Inspección se cifraban en un mínimo de 460 puestos, de los que “apenas se han incorporado 200 y no se espera ni uno más”.

“Nos preocupa la ligereza y superficialidad con la que se manejan los datos por parte de la ministra, y nos preocupa con más intensidad porque de dichas expresiones solo cabe concluir que está satisfecha con la situación que actualmente sufre la Inspección de Trabajo y Seguridad Social”, añade el comunicado. “La Inspección de Trabajo y Seguridad Social de este país está en estado próximo al de ruina. O se acometen con urgencia las medidas correctoras necesarias o el descalabro del organismo será de una envergadura sin precedentes”.

Los sindicatos “animan” a la vicepresidenta a que “se ponga desde ya a concretar las soluciones necesarias abandonando los mensajes demagógicos que en nada ayuda a superar los déficits existentes”. “De no ser así, el conflicto en este organismo será inevitable”, avisan.