En su intervención en el pleno del Congreso de los Diputados, Solbes subrayó que este plan ha sido "un instrumento enormemente eficaz", pero que ahora "debe adaptarse a la realidad". "Es imprescindible llevar a cabo modificaciones", afirmó.

Así, el ministro afirmó que "en situación de crisis" aparecen "algunos problemas", como "pagos que se posponen o un incremento de la morosidad".

Solbes respondió así al portavoz de ERC en el Congreso, Joan Ridao, quien pidió al vicepresidente segundo del Gobierno que la reforma incluya, entre otras cuestiones, un "seguimiento más cercano de la evolución fiscal para fomentar el cumplimiento voluntario" y "trabajar para reducir la dilación excesiva" para la resolución de las intervenciones de la Agencia Tributaria.

Asimismo, Ridao apostó por crear un grupo de expertos que realice una "evaluación oficial" sobre la evolución de la recaudación fiscal, con el objetivo de aumentar la transparencia y la información en esta materia.

El ministro afirmó que le parece "razonable" y "bien" que se constituya este grupo de análisis con expertos independientes", así como que se refuerce la colaboración con las comunidades autónomas.

Solbes afirmó que "el Gobierno siempre ha considerado como objetivo prioritario la prevención y la lucha contra el fraude" y que, gracias al plan aprobado en el año 2005, "se ha producido una mejora clara, con un crecimiento de la recaudación mucho mayor de la prevista".

A pesar de estos "resultados positivos" del plan, que muestran que ha sido "bastante eficiente", el vicepresidente advirtió de que "esto no quiere decir que estemos satisfechos ni que no debamos seguir trabajando".