Esto permitirá iniciar de manera inmediata el tratamiento y decidir el traslado al centro más adecuado para aplicar las técnicas terapéuticas que requiera el tipo de Ictus al que se enfrenta cada paciente ya sea hemorrágico o trombótico.

El Grupo Servicios Sociosanitarios Generales está colaborando desde el año 2020 en estudios para implantar biomarcadores de Ictus en las ambulancias para detección y clasificación precoz de esta enfermedad dado que hay diversos estudios que cuantifican en más de un 15% la reducción de las secuelas que se pueden conseguir implicando a las ambulancias en este proceso.

En esta línea, la empresa participa también en el proyecto internacional de diagnóstico ‘StrokCheck’, liderado por la start up médica ABCDx, que permitirá reforzar el diagnóstico del ictus a través de una segunda validación para aquellos pacientes que lo requieran.

TÉCNICAS AVANZADAS

El ictus es una enfermedad que afecta a una de cuatro personas por lo que actuar cuanto antes resulta fundamental.

El programa en el que colabora SSG, cuenta con los últimos criterios renovados y adaptados al nuevo arsenal terapéutico y de neuroimagen, para decidir si un enfermo recibe tratamientos de reperfusión.

Además, trabaja con técnicas avanzadas como es trombectomía mecánica. Esto es relevante porque este sistema de tratamiento solo se práctica en pocos centros de referencia por lo que el traslado a tiempo, en las primeras 6 horas, es algo básico para diagnosticar y tratar al paciente.

COMPROMISO CON LA INNOVACIÓN

Estas iniciativas de SSG se enmarcan en las actuaciones del grupo para liderar la innovación en el sector de transporte sanitario, ya que con estas participaciones la empresa amplia su presencia en varias redes de ambulancias, lo que la convierten en un ‘partner’ estratégico para implementar estas tecnologías que podrían revolucionar el manejo del Ictus en la fase aguda en los próximos años.

En los próximos meses se iniciarán las primeras experiencias piloto para probar el sistema en algunas de las ambulancias.