Así se desprende de los datos del Banco de España publicados este jueves que reflejan que en los nueve primeros meses del año los bienes y servicios también elevaron considerablemente su saldo positivo, desde los 9.300 millones en 2022 a 48.500 millones en este año. De los bienes y servicios, turismo y viajes arrojó un superávit de 47.900 millones, un 22,8% más que en el año pasado.

Por su parte, la renta primaria -que incluye rentas del trabajo, inversión, impuestos sobre la producción y la importación y subvenciones- y la secundaria -transferencias personales, impuestos corrientes, cotizaciones y prestaciones sociales, entre otras- reflejó un saldo negativo de 18.100 millones, superior al saldo negativo de 4.900 de un año antes.

En cuanto a la cuenta de capital, mostró 13.400 millones de superávit, cifra superior en un 14,5% a la registrada hace un año.

En suma, las cuentas corriente y de capital, que reflejan la capacidad de financiación, contabilizaron un saldo positivo de 50.800 millones entre enero y septiembre, lo que supone multiplicar por tres la cifra obtenida un año antes, de 16.800 millones.

Si solo se atiende al mes de septiembre, la cuenta corriente mejoró en 3.000 millones, pasando de un superávit de 500 millones en 2022 a 3.500 millones este año, y la de capital se redujo en 200 millones, hasta los 900 millones en positivo. Las cuentas corriente y de capital sumaron 4.400 millones de saldo positivo, un 175% más que en 2022.

En términos acumulados de 12 meses, en septiembre de 2023, el saldo neto de la cuenta financiera excluyendo el Banco de España fue deficitario, de 58.400 millones, frente a los 8.000 millones en septiembre de 2022. El saldo de la cuenta financiera del Banco de España frente al exterior se situó en 102.000 millones, muy por encima de los 18.100 millones de un año antes.