Así se desprende del ‘Informe sobre los determinantes sociales de la salud’, presentado este jueves en el 23º Congreso Nacional Farmacéutico, con la participación del secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, quien avanzó la puesta en marcha “en los próximos meses de la Red de Vigilancia en Salud Pública”, que contará con diferentes sistemas de vigilancia sanitaria.

Uno de ellos, muy novedoso, estará dedicado a conocer “las causas de las causas de las enfermedades” para "promover la equidad" de los diagnósticos y tratamientos sanitarios en toda España.

Una de las principales conclusiones del informe, elaborado por el Instituto de Salud Global de Barcelona (IS Global), es que se detecta la "gran influencia que tienen los factores socioeconómicos sobre las probabilidades de enfermar, vivir una discapacidad o morir prematuramente en adultos".

Además, "estos determinantes también dejan su huella en los niños cuyas familias se ven afectadas por circunstancias socioeconómicas adversas", como ocurre en los casos de exposición pasiva al humo de tabaco.

Según el estudio, los hombres se ven afectados en mayor medida por las conductas de riesgo, “existiendo una gran desproporción en el consumo de alcohol y en el de tabaco” si se compara con el consumo de las mujeres.

Además, el documento precisa que esta pérdida de calidad de vida se mide en años de vida ajustados por discapacidad (AVAD), definidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la cantidad de años no vividos en completa salud.

TABACO

Una de sus conclusiones es que el consumo de tabaco en hombres “llegó a producir más de 3.500 AVAD por cada 100.000 hombres” y también es el factor de riesgo al que se le achaca una mayor mortalidad en ambos sexos, “con una estimación de más de 24.500 muertes atribuibles durante 2019 España”.

Respecto al tabaco, causante principal de cáncer y enfermedad cardiovascular “se explica que "no sólo hace mella en la salud de los consumidores activos, sino que casi un 7% de las muertes atribuibles al tabaco en 2019 se produjeron en fumadores pasivos”. Por ello, desde IS Global proponen estudiar qué factores determinan ambos tipos de exposición al tabaco.

En el caso de España existe factores socioeconómicos que fomentan consumos mucho más altos que la media, "entre colectivos como varones de etnia gitana o china, personas Lgtbi+ o personas afectadas por problemas de salud mental y adicciones".

ALCOHOL

En cuanto al consumo de alcohol, es el tercer factor de riesgo al que más muertes se le atribuyen y el cuarto que más pérdida de calidad de vida genera en personas no ancianas en España.

De esta manera, el consumo de alcohol aumenta el riesgo de padecer múltiples trastornos graves como enfermedades digestivas o tumores, y se le atribuyen, según estimaciones del estudio, una pérdida de 1.040 años de vida ajustados por discapacidad (o años que no vivimos en completa salud) por cada 100.000 habitantes y más de 8.600 muertes en nuestro país durante 2019.

SOBREPESO

Según IS Global, existe un mayor riesgo de padecer sobrepeso u obesidad en España en personas con bajo nivel educativo, carencia de empleo e inseguridad financiera. "Los hallazgos reflejaron que presentar alguna de esas características supone un riesgo un 43% más alto de presentar sobrepeso u obesidad comparado con el resto de la población". Y si los tres factores se dan de manera simultánea, el riesgo llega a duplicar e incluso triplicar el que presenta el resto de la población.

Además, en España se detecta que las personas de origen migrante tienen "el doble de prevalencia de obesidad que la población autóctona, una desigualdad que comienza a hacerse patente ya en la infancia".