Clima

La Tierra entra en un “territorio inexplorado” con niveles récord en 20 de las 35 “señales vitales”

- Según un informe firmado por más de 15.000 científicos

- Menos subsidios a combustibles fósiles y más dietas basadas en plantas, recomendaciones

MADRID
SERVIMEDIA

Más de 15.000 científicos pertenecientes a 161 países han firmado un informe climático que advierte de que la Tierra se adentra en un “territorio inexplorado” porque 20 de las 35 “señales vitales” se encuentran ya en “extremos récord”.

El estudio, publicado este martes en la revista ‘BioScience’, señala que las “señales vitales” de la Tierra han empeorado más allá de lo que los humanos hayan visto hasta el momento, hasta el punto de que la vida en el planeta está en peligro.

William Ripple, profesor distinguido de la Facultura de Silvicultura de la Universidad Estatal de Oregón (Estados Unidos), y Christopher Wolf, de de Terrestrial Ecosystems Research Associates (Estados Unidos), son los autores principales del informe, del que resultan ser coautores otros 10 científicos.

"Sin acciones que aborden el problema fundamental de que la humanidad toma más de la Tierra de lo que puede dar con seguridad, estamos en camino al posible colapso de los sistemas naturales y socioeconómicos y a un mundo con un calor insoportable y escasez de alimentos y agua dulce", sentencia Wolf.

Este estudio actualiza otro de hace cuatro años, cuando 11.258 científicos de 153 países difundieron una declaración en la que afirmaron "clara e inequívocamente que el planeta Tierra se enfrenta a una emergencia climática", ante lo cual propusieron seis áreas en las que la humanidad debería tomar medidas inmediatas para frenar los efectos de un mundo en calentamiento, entre ellas usar solo energías renovables, comer menos carne y frenar el aumento demográfico global.

“MÁRGENES ENORMES”

Los autores comparten nuevos datos que ilustran que este año se han batido por “márgenes enormes” muchos récords relacionados con el clima, en particular los relacionados con las temperaturas de los océanos y el hielo marino, y mencionan la “extraordinaria temporada” de incendios forestales en Canadá, que produjo emisiones de dióxido de carbono sin precedentes.

"La vida en nuestro planeta está claramente bajo asedio", indica Ripple, antes de añadir: “Las tendencias estadísticas muestran patrones profundamente alarmantes de variables y desastres relacionados con el clima. También encontramos pocos avances que reportar en lo que respecta a la humanidad en la lucha contra el cambio climático”.

El informe subraya que los subsidios a los combustibles fósiles (acciones de los gobiernos que reducen artificialmente el coste de la producción de energía, aumentan el precio recibido por los productores o reducen el precio pagado por los consumidores) se duplicaron entre 2021 y 2022, al pasar de 531.000 millones de dólares a poco más de un billón de dólares.

Los incendios forestales en Canadá han bombeado ese año más de una gigatonelada de dióxido de carbono a la atmósfera, cifra superior a las emisiones totales de gases de efecto invernadero de ese país en 2021 (0,67 gigatoneladas).

En 2023 ya ha habido 38 días con temperaturas medias globales de más de 1,5 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales. Hasta este año, esas jornadas eran una rareza, según los autores los autores.

Además, la temperatura media más alta jamás registrada en la superficie de la Tierra se produjo en julio pasado y hay razones para creer que fue la más alta que la superficie del planeta haya visto en los últimos 100.000 años.

Los autores también plantean preocupaciones sobre los riesgos relacionados con el clima para la seguridad alimentaria y recalcan que 735 millones de personas tuvieron hambre crónica en 2022, aproximadamente 122 millones más desde 2019.

“ENORMEMENTE PREOCUPADOS”

Wolf recalca que, “para finales del siglo XXI, entre 3.000 y 6.000 millones de personas podrían encontrarse fuera de las regiones habitables de la Tierra, lo que significa que se enfrentarán a un calor intenso, una disponibilidad limitada de alimentos y elevadas tasas de mortalidad”.

"Como científicos, estamos enormemente preocupados por los aumentos repentinos en la frecuencia y gravedad de los desastres relacionados con el clima", indica Wolf, quien agrega: “La frecuencia y gravedad de esos desastres podrían estar superando el aumento de las temperaturas”.

Los autores destacan que se necesitan políticas que apunten a la cuestión subyacente del "exceso ecológico". Cuando la demanda humana sobre los recursos de la Tierra es demasiado grande se produce una serie de crisis ambientales, incluida la disminución de la biodiversidad. Mientras la humanidad siga ejerciendo una presión extrema sobre el planeta, cualquier estrategia que se centre únicamente en el carbono o el clima simplemente redistribuirá la presión, señalan.

Si no se actúa rápidamente, según los autores, más de la mitad de la población mundial podría quedar "confinada más allá de la región habitable" de la Tierra, sujeta a un calor mortal, una disponibilidad limitada de alimentos y una mortalidad elevada.

"Nuestro objetivo es comunicar hechos climáticos y hacer recomendaciones de políticas. Es un deber moral de los científicos y de nuestras instituciones alertar a la humanidad de cualquier posible amenaza existencial y mostrar liderazgo al tomar medidas", sentencia Ripple.

RECOMENDACIONES

Los autores instan a una transición hacia una economía global que dé prioridad al bienestar humano y limite el consumo excesivo y las emisiones excesivas por parte de los ricos.

Las recomendaciones específicas incluyen la eliminación gradual de los subsidios a los combustibles fósiles, la transición hacia dietas basadas en plantas, la intensificación de los esfuerzos de protección forestal y la adopción de tratados internacionales de eliminación del carbono y de no proliferación de combustibles fósiles.

Destacan que todas las acciones relacionadas con el clima deben basarse en la equidad y la justicia social, y señalan que las condiciones climáticas extremas y otros impactos climáticos afectan de manera desproporcionada por las personas más pobres, que son las que menos han contribuido al cambio climático.

Los autores también enfatizan la necesidad de justicia de género, incluido un mayor apoyo a la educación y los derechos de las mujeres y las niñas.

"Este es nuestro momento de marcar una profunda diferencia para toda la vida en la Tierra y debemos abrazarlo con valentía y determinación inquebrantables para crear un legado de cambio que resista la prueba del tiempo”, concluyen.

(SERVIMEDIA)
24 Oct 2023
MGR/gja