Los comités de huelga de los ballets nacionales han presentado varias propuesta a los grupos de trabajo integrados por la Administración y las centrales sindicales y han amenazado con continuar los paros si no se atienden sus reivindicaciones.

En estas propuestas, los comités de huelga exigen la homologación de los títulos actuales de Danza a la titulación superior requerida, para poder incorporarse así al grupo profesional 1 del convenio único de todo el personal artístico.

Igualmente, solicitan el reconocimiento de una categoría superior para los técnicos que figuran ahor como ayudantes de sonido y que desempeñan tareas de oficial, así como la categoría de músicos para los pianistas, guitarristas y demás instrumentistas no reconocidos como tales en el convenio de origen de sus respectivas compañías.

Por otra parte, los bailarines piden tener la posibilidad de reciclarse -una vez finalizada su actividad artística- en áreas de docencia, mediante la firma de acuerdos con las comunidades autónomas competentes.

Por último, reclaman que los efectos económicos del acuero de integración plena del personal del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) en el convenio único rijan desde el 1 de enero de 1999, como ocurre con todo el personal laboral de la Administración del Estado, y no desde el 1 de enero de 2000, como se ha establecido.

PAROS

Representantes de los comités de huelga de los ballets nacionales aseguraron en la rueda de prensa que mantendrán los paros ya convocados mientras la situación no mejore, ya que, indicaron, no están pidieno nada extraordinario, sólo que se les mantengan las condiciones laborales existentes en sus convenios de origen.

Carlos Guerrero, del Ballet Nacional, recordó que su compañía ya ha tenido que suspender una actuación en Lisboa, mientras que Luis Martín, de la Compañía Nacional de Danza, afirmó que su ballet estuvo a punto de parar también en Sydney, lo que se evitó por la mediación del director artístico de la compañía, Nacho Duato, que prometió hablar con la ministra de Educación y Cultura, Pilar delCastillo, para tratar de mejorar la situación laboral de los trabajadores.