El Ejecutivo vasco, que tiene transferidas las competencias de tráfico que en el resto de España ejerce la Dirección General de Tráfico, subrayó que ese descenso se produjo pese a que, a lo argo de esa década, el número de vehículos matriculados en el País Vasco aumento un 36% y el de conductores un 20%.

Estas cifras colocan a Euskadi a la cabeza de los planes de la UE para la lucha contra la mortalidad en las carreteras europeas. De acuerdo con esos planes, los paises de la UE deberían ser capaces de reducir el número de fallecidos en accidentes de tráfico en un 40% entre 1995 y el 2010, pasando de los 45.000 que hubo en ese primer año a los 38.000 que se calcula que habrá en el present 2000, y a 27.000 en el 2010.