Estas actuaciones suponen una de las obras de infraestructura hidráulica de mayor presupuesto realizada en los últimos años y permitirán incrementar notablemente la capacidad de regulación en la demarcación hidrográfica del Guadiana, según informó este miércoles el departamento dirigido por Teresa Ribera.

Este proyecto, que ha sido aprobado en Consejo de Ministros, supone la interconexión de embalses ya construidos, todos ellos ubicados en la demarcación hidrográfica del Guadiana, lo que permitirá optimizar su gestión y maximizar el aprovechamiento del agua.

De este modo, las obras consistirán en la construcción de un canal de 36 kilómetros que prolongará el ya existente entre las presas de García de Sola y Sierra Brava, que llega hasta el embalse del Búrdalo, lo que completará esta manera el Complejo Hidráulico de las Dehesas.

El objetivo fundamental es completar el eje vertebrador para que la recogida de las aguas sea íntegra en la zona. Entre los efectos favorables que tendrá la actuación en el entorno se encuentran el refuerzo del canal de Orellana y el aprovechamiento adecuado del agua de las cuencas.

Al conseguir una mejora en la regulación de la cuenca, se hará más eficiente el uso del agua disponible, lo que garantizará el caudal ecológico en las cuencas deficitarias. Al disponer de una mayor capacidad de regulación se evitarán inundaciones provocadas por fuertes lluvias.

La mejor regulación de las cuencas permitirá disponer de más cantidad de agua, que, a su vez, propiciará una mejor calidad del recurso en caso de años de sequía, especialmente en las cuencas deficitarias.