Sánchez declaró a Servimedia que el Ejecutivo ha negociado durante años con padres, empresarios y comunidades autónomas, y ha sacado adelante una norma que se sitúa "en el fiel de la balanza".

Destacó que mientras a los empresarios ls hubiera gustado que no se rebajara la edad máxima permitida para los vehículos, asociaciones de padres y oposición han lamentado que se demore su implantación plena hasta 2007.

Para Fomento, es razonable este periodo transitorio porque muchas empresas son pequeños capitales que tienen que hacer una inversión considerable para modernizar su flota.

El Gobierno cree que el reglamento mejorará sensiblemente la seguridad del transporte escolar y para las comunidades autónomas no supondrá un sobrecose extraordinario de inversiones.