Miembros de la Federación de Asociaciones de Personas Ostomizadas de España (Fapoe) se reunieron en Madrid, en la sede del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, con la coordinadora del área de normativa técnica de la Subdirección General de Arquitectura y Edificación de este departamento, Isabel Marcos.

En la reunión también estuvieron presentes los arquitectos Elena Frías y Juan Queipo, de la Unidad de Calidad en la Construcción del Instituto Torroja de Ciencias de la Construcción, asistencia técnica de este Ministerio en relación con el Documento Básico de Seguridad de Utilización y Accesibilidad del Código Técnico de la Edificación para plantear la necesidad de que los aseos adaptados a personas ostomizadas se regulen e incluyan en el CTE.

Ambas partes se comprometieron a elaborar un documento relativo a los aseos, para después elevarlo al Ministerio y lanzar una orden ministerial para que se regulen mediante una Ley. Además, los representantes de la Fapoe también facilitaron al departamento ministerial, un documento elaborado por el Cermi Estatal sobre estos aseos, ya que tanto Fapoe como el Cermi han estado meses trabajando conjuntamente en este sentido.

PROCESO LENTO

Los arquitectos que estuvieron presentes en la reunión entendieron perfectamente que las personas ostomizadas necesiten un aparato sanitario que reúna una serie de requisitos para que sea funcional, como también entendieron la urgencia que tienen las personas ostomizadas, pero aseguraron que el proceso es lento y tedioso, a la vez que afirmaron que se van a poner a trabajar para que se regulen.

Según el presidente de Fapoe y de la Asociación de Ostomizados de Castilla-La Mancha, Javier Muñoz, “el compromiso alcanzado es algo muy importante para las más de 210.000 personas que estamos ostomizadas porque implica que vamos a poder vivir sin estar encerrados en casa, que vamos a poder hacer vida social plena, y en definitiva que vamos a poder normalizar nuestras vidas, algo que, sin estos aseos es imposible”.

A este respecto, matizó que “no tenemos esfínter en el estoma, con lo que controlar la salida de las excretas corporales es imposible, son grifos abiertos de heces y/u orina y si la bolsa se llena hay que vaciarla o cambiarla con urgencia, para evitar reventones, fugas y acabar manchados”.

Por su parte, el vocal de la Fapoe y presidente de la Asociación de Ostomizados de Tenerife, Jorge González, afirmó que llevan “años peleando baños por todo el país, los pocos que tenemos ahora mismo se han logrado a base de picar puertas, algo que para nosotros, que además de estar ostomizados tenemos enfermedades de base, supone un desgaste tremendo, por poner un ejemplo en toda la Comunidad de Madrid, solo hay cuatro aseos, y ninguno en la capital, dos están en el aeropuerto de Barajas y dos más en hospitales de Majadahonda y San Sebastián de los Reyes”.

En el momento en que los aseos para ostomizados estén regulados e incluidos en el CTE todos los edificios públicos y de uso público que sean de nueva construcción o se rehabiliten, van a tener que incorporar estos aseos.