Este acuerdo debe ser respaldado y adoptado formalmente por ambas instituciones comunitarias antes de su publicación en el Boletín Oficial de la Unión Europea para que entre en vigor.

La norma parte de una revisión del Reglamento sobre el Mercurio propuesta por la Comisión Europea el 14 de julio de 2023 con el fin de controlar la contaminación por ese metal pesado y cumplir las obligaciones internacionales de la UE en esa materia, en particular el Convenio de Minamata.

El mercurio es una sustancia muy tóxica que representa una grave amenaza mundial para la salud humana y el medio ambiente. Se utiliza en procesos industriales y en diversos productos, como lámparas y amalgamas dentales. Su exposición a niveles elevados puede causar daños al sistema nervioso central, los pulmones, los riñones y el sistema inmunitario.

LÁMPARAS

El Reglamento sobre el Mercurio aborda todo el ciclo de vida del mercurio, desde su extracción primaria hasta la eliminación final de los residuos. Esta norma ya prohibía el uso de amalgama dental con mercurio para niños y mujeres embarazadas desde el 1 de julio de 2018.

Las amalgamas dentales contendrán relleno sin mercurio a partir del próximo año. No obstante, la norma permite una excepción limitada y temporal hasta el 30 de junio de 2026 para el uso, la fabricación y la importación de amalgama dental con mercurio en los países de la UE que necesiten más tiempo para adaptar su sistema nacional de asistencia sanitaria.

Además, el uso, la fabricación y la importación de amalgama dental con mercurio seguirán permitiéndose para necesidades médicas específicas cuando un médico lo considere estrictamente necesario.

También se prohibirá la producción y exportación de lámparas que contienen mercurio, que se sustituirán por alternativas como los LED, más eficientes energéticamente, lo que ocurrirá desde el 31 de diciembre de 2025 o el 30 de junio de 2026, dependiendo de la categoría de la lámpara.