El sindicato apuntó que en este 2024 se deben abordar las “deficiencias que persisten en el mercado de trabajo”, aunque destacó que transcurre “otro año de aplicación de la reforma laboral de 2021”, con la que se observó “con más claridad” los “avances conseguidos en materia de calidad y estabilidad del empleo”.

Para UGT, el “mejor ejemplo de ello” es la tasa de temporalidad que “continúa en mínimos del 14%”, mientras que antes de la reforma “se situaba alrededor del 30%” y subrayó que es aún “más relevante” la reducción de la temporalidad entre los jóvenes menores de 30 años que según el sindicato, se mantiene en el 22%, ascendiendo antes de la reforma al 53%.

En materia de contratación, el sindicato resaltó que “se está estabilizando” en torno a una contratación más estable y de mayor calidad destacando el contrato indefinido a tiempo completo, “el más estable”, que hace que “ahora se firman menos contratos que antes de la reforma, pero más estables y de mejor calidad, en tanto que se ha puesto trabas al encadenamiento de contratos temporales”.

Para UGT, esta reforma demostró una “mejora de las condiciones en las que se desenvuelven los puestos de trabajo y de la estabilidad del mercado laboral”, además de suponer “más calidad de vida para las personas trabajadoras”, lo que se traduce en una “mayor fortaleza y capacidad de la economía para hacer frente a posibles adversidades”.

Pese a estos datos, UGT instó a trabajar en la mejora del mercado de trabajo, ya que “es inadmisible que existan personas que se encuentren en situación de pobreza incluso disponiendo de un puesto de trabajo”.

Para lograr esto, el sindicato insta a seguir “reforzando” las políticas de empleo y “elevar los incrementos salariales para recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos años” y aplicar reformas de los sistemas de protección social para “apoyar los ingresos de las familias más vulnerables”.