Salud mental

Una de cada cuatro adolescentes tiene un estado de ánimo bajo, el doble que los chicos, según un estudio

- Ser inmigrante, hacer dieta y fumar tabaco a diario son factores de riesgo para las chicas

MADRID
SERVIMEDIA

Una de cada cuatro adolescentes tiene un estado de ánimo bajo, el doble que los chicos, según un estudio. Los investigadores determinan que la prevalencia de un estado anímico bajo "tiene un claro componente de desigualdad", ya que afecta a un 11,6 % de los chicos y un 25,1 % de las chicas.

Así se desprende de la investigación, publicada en abierto en la revista ‘Journal of Affective Disorders’. El estudio ha sido realizado por Helena González-Casals, doctoranda de la Universidad Abierta de Cataluña (UOC en catalán), del programa Salud y Psicología, bajo la dirección de Marina Bosque, investigadora principal del grupo Epi4health de los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC, vinculado al eHealth Center; y por Albert Espelt, de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).

"Hemos constatado la existencia de desigualdades de género en salud mental entre los adolescentes, con un estado de ánimo bajo 2,2 veces más frecuente entre las chicas que entre los chicos, y el 36 % de esta diferencia se explica por los determinantes sociales y los comportamientos relacionados con la salud", explicó la doctora Marina Bosque.

La prevalencia de estado anímico bajo se sitúa en el 18,6 % de los adolescentes sin distinción de sexo, según dicha investigación, que se ha realizado a partir de los datos del proyecto DESKcohort, que tiene como base una encuesta sobre comportamientos de salud que se repite cada dos años en los institutos públicos y privados de la Cataluña central.

El programa empezó el curso 2019-2020 y recopiló datos de 6.428 adolescentes de entre 12 y 18 años.

DIFERENCIAS POR SEXO

Estas diferencias se explican principalmente por factores que también se relacionan con el estado de ánimo. Según los expertos, desempeña un papel muy importante en ello "la violencia sexual que sufren las chicas, pero también afecta el hecho de que las adolescentes dedican menos tiempo a hacer actividad física que los chicos, ya que el 57 % no cumple con los requisitos mínimos establecidos por la OMS".

Además, ser inmigrante, hacer dieta y fumar tabaco diariamente también se asoció con un estado de ánimo bajo únicamente en las chicas, mientras que el consumo de riesgo de alcohol solo se asoció en los chicos.

En cuanto a las variables sociales de exposición, se observó una mayor prevalencia de estado de ánimo bajo tanto en chicos como en chicas con una situación socioeconómica desfavorecida.

Tener notas más bajas, abusar del teléfono móvil o sufrir 'bullying' son otros factores asociados que no parecen tener diferencias de género.

En el polo opuesto, la mayor parte de la diferencia entre géneros en la prevalencia del estado de ánimo bajo se debe al hecho de haber sufrido violencia sexual.

PREVENIR LA ENFERMEDAD MENTAL

Según las autoras, estos resultados pueden ser útiles para hacer un trabajo preventivo y detectar malestares y sintomatología antes de que se produzca un empeoramiento o cronificación y se pase de un estado de ánimo bajo a trastornos más severos, como podrían ser la ansiedad o la depresión.

"Ahora podemos conocer la situación actual sobre la salud mental del colectivo adolescente y ver qué factores se relacionan con ello, y esto nos permite pensar y desarrollar acciones preventivas dirigidas a mejorar la salud mental de este colectivo que sean mucho más completas y que tengan un impacto mayor", detalló Helena González-Casals.

Las investigadoras defienden que, debido a las características del territorio, la muestra tiene mucha variabilidad, puesto que participan adolescentes de ciudades como Manresa o Igualada, pero también de pueblos más pequeños.

"Por lo tanto, nos podemos hacer una idea aproximada de lo que pasa en otras poblaciones y extrapolar los resultados de este estudio al resto de la población adolescente catalana", concluyó González-Casals.

(SERVIMEDIA)
16 Jun 2023
CAG/gja