Luzón aseguró que la muestra, cuya inauguración estaba prevista inicialmente para el pasado mes de noviembre, se aplazó finalmente "porque nos pareció oportuno que, por su contenido y su calidad, se enmarcase en el año de mayor proyección exterior de la capital".

"El Muno Micénico", que traza un recorrido histórico a través de cinco siglos (del 1600 a. de C. al 1100 a. de C.) de la primera civilización europea de que se tiene noticia, es una aportación del Gobierno griego como contrapartida a la que el Ministerio de Cultura español celebró en Creta sobre El Greco.

Esta exposición, heredera de la que se celebró en Berlín en mayo de 1988 en torno al mundo homérico y los hallazgos arqueológicos de Heinrich Schliemann, se ha enriquecido con nuevas piezas procedentes de Cipre, Sicilia y España, que reflejan la expansión micénica por el Mediterráneo.

Precisamente dos de las piezas expuestas son unos fragmentos de vasija encontrados en la localidad cordobesa de Montoro, que constituyen la primera prueba física irrefutable de la presencia micénica en la península ibérica, hasta ahora sólo insinuada por algunos estudiosos.

El profesor José Luis Melena, encargado de la coordinación en España de esta muestra y el catálogo, que son obra de un equipo de arqueólogos griegs del Museo Nacional de Arqueología de Atenas, afirmó que uno de los principales logros de la cultura micénica fue la escritura, de carácter lineal.

La exposición consta de 403 piezas, que siguen un criterio didáctico y científico, y abarca la difusión geográfica de la civilización micénica por las regiones de Argólide, Laconia y Mesenia, así como las parcelas culturales de pintura, escultura, religión, economía y vida cotidiana.