Lo hizo en un comunicado en el que destacó que la edad media de acceso al primer móvil es de 10,96 años; que el 94,8% de los adolescentes dispone de móvil con conexión a Internet; que el 59,1% del alumnado de la ESO acude a su centro educativo con un teléfono; y que el 58,4% de los chavales duerme con el móvil en su habitación.

Ante esta situación, Unicef y la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) publicó el pasado mes de noviembre un decálogo de recomendaciones dirigidos a los padres para un uso responsable del teléfono móvil por parte de los niños y adolescentes.

Entre esos consejos, destaca que “igual que se habla con los hijos en otros momentos vitales importantes para ellos, como, por ejemplo, cuando empiezan a conducir y se les orienta y aconseja, se puede hablar con ellos y ellas cuando se les da un móvil, para que no sea un ‘le das un móvil y ya’”.