Una toxina producida por la bacteria del cólera estimula la respuesta inmunológica incluso con sólo tocar la piel. Se trata de la manera más rápida conocida de estimular la respuesta inmunológica, según han descubierto científicos del Insttuto de Investigación del Ejército "Walter Reed".

Pruebas con roedores han confirmado la efectividad del cólera para ayudar al cuerpo a generar anticuerpos contra la difteria y el tétanos. Antes de que termine el mes de febrero, la vacuna "sin aguja" va a probarse en humanos. Si no hay ningún problema, podría comercializarse de aquí a 5 ó 10 años.

Este método podría revolucionar los programas de vacunación. Para los países en vías de desarrollo, esto supondría un gran avance. Ahora el coste de la agujas en estos países es, por lo general, prohibitivo.

La idea de usar una enfermedad potencialmente peligrosa para producir beneficios médicos se quiere usar ahora en terapia genética, según "Nature". Por ejemplo, una forma débil de VIH podría ser usado para curar la fibrosis cística.