El responsable de Anfac explicó que eso se traducirá en una caída de la producción de alrededor del 10 por ciento en el primer trimestre de 1993, lo que exigirá nuevas regulaciones de empleo y eventuales recortes de plantilla.

Según Fernández Laguilhoat, a la caída de las ventas en el mercado doméstico se ha unido en los últimos meses la disminución de las exportaciones, que se redujeron un 12 por ciento el pasado mes de octubre. El descenso de las exportaciones, que suponen el 70 por ciento de las ventas de los automóviles fabricados en España, provocará un recorte de la producción ya en el cuatro trimestre de este año, en el que se fabricarán unos 46.000 vehículos menos que en el mismo periodo del 91, según Anfac.

El principal problema reside en que está cayendo la importación alemana de coches españoles, a pesar de la devaluación de la peseta, si bien todavía en los diez primeros meses del año la exportación total del sctor aumentó casi un 11 por cien.

Fernández Laguilhoat recalcó que las fábricas están reduciendo producción desde julio, sin esperar al 93, año en el que el conjunto del sector no obtendrá beneficios, "salvo que se produzcan verdaderos milagros".

Para 1992, Anfac estima que las ventas de turismos en el mercado nacional será de unos 950.000 vehículos, lo que supone un aumento del 7,2 por ciento sobre 1991, que fue el peor ejercicio de los últimos cinco años.

El director general de Anfac señal que las ventas de automóviles no podrán escapar el año que viene a la depresión económica general. "Lo que pasa es que la gente no tiene dinero para comprarse el coche, tan vulgar como eso", agregó.

Agregó que la disminución de las ventas internas y las crecientes dificultades para exportar podría llevar a una "guerra de precios" entre las compañías automovilísticas para colocar su producción.

REGULACIONES

Por otra parte, según datos de CCOO facilitados a esta agencia, más de 150.000 trabajadoes del sector de automoción se vieron afectados por los expedientes de regulación de empleo presentados por las compañías hasta el pasado 26 de noviembre.

CCOO afirma que el INEM tendrá que pagar unos 20.000 millones de pesetas por estos expedientes, al hacerse cargo del 70 por ciento de los salarios de los empleados incluidos en ellos.