Así lo indicó Millán en rueda de prensa desde la Cámara Baja, donde incidió en que esto “no es más que un parche” y que es una “consecuencia lógica de años de dejadez” y de una política “absolutamente irrisoria en lo que al agua se refiere”. “Agua hay, lo que no hay es una buena gestión”, añadió.

En relación con este “parche”, la portavoz de Vox en el Congreso quiso saber “cuánto va a costar trasladar el agua desde Valencia hasta Barcelona” y “cuánto es” la “huella de carbono de esos buques”. “Aquí estamos ante políticas que se están dedicando a gestionar las consecuencias y no a abordar las causas”, lamentó.

Recordó que en 2008 ya se trasladó agua de Tarragona y Barcelona e insistió en que, si se produce el trasladado de agua desde Valencia, debería “ir ligado a la certeza de que el Gobierno se va a sentar y va a elaborar un plan que permita solventar ese problema de sequía y de agua en Cataluña y en todas las regiones de agua”.

En este sentido, señaló que habría que preguntarse si el actual Ejecutivo catalán permitiría que fuera al revés y se llevase agua de Cataluña a Murcia. “¿Eso sería posible?”, preguntó, y agregó que “hace falta una visión nacional y dejar a un lado los egoísmos que ha propiciado el sistema autonómico”.

Insistió en que el “problema” de la sequía se tiene que abordar “desde el punto de vista nacional” porque “las irrisorias políticas hídricas están poniendo de manifiesto el desastre y el colapso del sistema autonómico, donde este problema se está abordando desde 17 reinos de taifas donde cada uno mira su ombligo”.

Lo que “no se ha hecho hasta ahora”, dijo, es “abordar este problema desde el punto de vista nacional, hay que invertir en estructuras hídricas, garantizar la interconexión de las cuencas, construir embalses” y “hacer una política hídrica común que permita que en España haya una autopista del agua”.