Así, como ya hizo el partido de Santiago Abascal en el Congreso de los Diputados, sus senadores reiterarán su “frontal oposición” a una ley de amnistía que, tal y como “han confirmado los propios letrados del Senado, y como ha denunciado Vox desde que se conociera”, es “claramente inconstitucional”.

Asimismo, aseguran que se trata de una norma contra la que Vox ha puesto “todas las armas jurídicas sobre la mesa”, como inadmisión a trámite, el planteamiento de un conflicto institucional y la solicitud de informes, entre otras. Incluso se querelló contra los responsables de su admisión en el Congreso.

Ahora, expondrá en el Senado la “perversidad” de la iniciativa “desde el punto de vista moral”, ya que “otorga impunidad” a unos “criminales” a cambio de los votos parlamentarios que dieron vida al Gobierno actual. Es “una transacción corrupta entre quienes ya dieron un golpe de Estado y quienes están dispuestos a vender la nación a cambio de unos votos para continuar gobernando”.

Finalmente, en un sentido propiamente político, la ley de amnistía es vista por Vox como “la base a la alianza renovada de un Gobierno sectario y destructivo con los separatistas; una alianza que no acabará cuando se apruebe la ley, sino que, tal y como los propios separatistas han declarado sin pudor, es solamente otro hito en su hoja de ruta hacia la ruptura de la unidad nacional”.