Así lo indicó Garriga en declaraciones ante los medios, después de que la Comisión Interdepartamental de Sequía, dependiente del Gobierno catalán, decretase hoy la fase 1 de emergencia por sequía en 202 municipios de las provincias de Barcelona y Girona, una decisión que afectará a cerca de 6 millones de catalanes.

Garriga apostó por “señalares como aquellos que no han ejecutado los planes presupuestarios que tenía, por ejemplo, la Agencia Catalana del Agua, que no han hecho ningún tipo de mejora en las infraestructuras, ni han promovido ningún tipo de pantano” para que “hoy los catalanes tengamos que estar condenados a restricciones y a multas”.

Criticó que “llevamos muchos años viendo como los separatistas y la izquierda no han hecho ni una inversión en las infraestructuras que están decadentes” y “han despreciado el plan hidrológico nacional que Vox lleva promoviendo y defendiendo dese hace muchísimo tiempo”, ya que “el agua es un bien que forma parte de todos los españoles”.

De este modo, Vox pide que se ponga en marcha un plan nacional del agua frente a las medidas “improvisadas” contra la sequía de Cataluña y Andalucía que “perjudican gravemente al sector primario y la ciudadanía”. Según expone este partido en una nota, el “problema” proviene “de la falta de infraestructuras para poder responder a situaciones concretas, como la sequía”.

Ante esta situación, Vox insiste en la “necesidad urgente” de ejecutar un plan nacional del agua que contemple la interconexión de todas las cuencas mediante el trasvase de 10.000 hectómetros cúbicos para la puesta en regadío de 2,5 millones de hectáreas y apoyo a la reforestación.

Asegura que la extensión de regadíos, puesta ya en marcha en Murcia gracias al trasvase Tajo-Segura, “puede lograr la creación de 5 millones de empleos, el aumento de población en las zonas beneficiadas, incrementar la producción agrícola e industrial de España y con ello tender a la disminución de la deuda pública”.