WWF/Adena envió una carta al presidente del Gobierno; el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, y los presidentes de todas las comunidades autónomas en la que la organización ecologista pide que adopten medidas para garantizar la seguridad en estas instalaciones.

Asimismo, pide la inmediaa transposición de la nueva directiva europea que regula los zoológicos y la creación de una legislación estricta que afecte a todos los centros que albergan fauna salvaje.

A juicio de los ecologistas, estas instalaciones deberían contar con programas de educación ambiental que fomenten en los niños el respeto a la vida animal, la puesta en marcha de estudios científicos y estar adscritas a programas internacionales de cría en cautividad de especies amenazadas.

Para WWF/Adena, "es inadmisible el antenimiento de un negocio que vaya en detrimento del bienestar animal y cuya prioridad sea buscar el máximo beneficio económico, sacrificando las necesarias inversiones para garantizar una mejora de las instalaciones y el cumplimiento de dichas funciones".

La organización ha pedido la elaboración de un inventario exhaustivo de todos los centros que albergan fauna salvaje y la imposición de un nuevo modelo de gestión.