Los dirientes socialistas han mostrado públicamente sus ironías en torno al "glorioso" tratamiento dispensado por el presentador estrella de la televisión estadounidense al presidente español, al que tuvieron esperando más de una hora para finalmente hacerle una entrevista de cuatro minutos y veinte segundos.

En los pasillos del Congreso de los Diputados, el líder socialista lamentó "que se hubieran creado ciertas expectativas" en torno a esa entrevista. "A lo mejor los servicios de prensa de Moncloa deberíanhacer una reflexión", agregó.

"Es el presidente de nuestro país, de viaje oficial en un país importante, y eso debería suscitar una reflexión sobre cómo hacer el trabajo previo a esa visita".