El dirigente ugetista, en declaraciones a Servimedia, afirmó que el hecho de que exista una "grieta" provocada por el comportamiento de CCOO al firmar el acuerdo de pensiones "no impedirá que UGT ponga por delante los intereses de los trabajadores a este problema".

Ferrer manifestó que el recorte de derechos sociales, la reforma laboral, las amenazas sobre negociación olectiva y la actual situación económica obligan a los sindicatos a responder al Gobierno, y no a enredarse con asuntos particulares, que llevarían a "la derecha" a disfrutar de un Primero de Mayo de división.

El dirigente de UGT confirmó a esta agencia la existencia de un contacto telefónico entre su líder, Cándido Méndez, y el secretario general de CCOO, José María Fidalgo, en la que acordaron reunirse la semana que viene.

Ferrer destacó la importancia de que se produzca ese encuentro para acerar posturas ante el Primero de Mayo. Mientras, fuentes de CCOO confirmaron esa llamada, aunque incidieron en el tono "distante" de la misma y en que sólo sirvió para fijar ese nuevo encuentro.