En concreto, la CNMC informó este martes de que el requerimiento es un paso previo que busca evitar la interposición de un recurso contencioso-administrativo contra el real decreto que regula los procedimientos de aplicación de los tributos en lo relativo a los intermediarios de viviendas turísticas.

De acuerdo con el nuevo precepto, los intermediarios en la cesión de viviendas para fines turísticos deberán presentar periódicamente una declaración informativa sobre las cesiones de viviendas en las que intermedien, con fines de prevención del fraude fiscal.

Así, la CNMC considera que el real decreto no delimita con claridad quienes serán los sujetos obligados a proporcionar la información y que si se incluye entre los obligados a entidades que no intervienen en todas las fases de la transacción, se podría imponer a estas entidades una carga sustantiva, que puede tener un efecto restrictivo de la competencia.

Por su parte, Airbnb señaló que “quiere ser un buen socio en cuestiones de impuestos y quiere trabajar con el Gobierno en soluciones de sentido común que faciliten que los anfitriones paguen su parte justa de impuestos”. Sin embargo, consideran que “las normas actuales suponen un paso atrás para ese objetivo y estamos de acuerdo con la CNMC en que las obligaciones son impracticables”. “Airbnb agradece sus comentarios y esperamos tener la oportunidad de trabajar con el Gobierno en una vía mejor”, añadió la compañía.