Según informó el Estado Mayor de la Defensa (Emad), durante las ocho semanas que duró su instrucción los soldados iraquíes permanecieron bajo responsabilidad de adiestradores españoles que les instruyeron en ejercicios de tiro con fuego real tanto diurno como nocturno, incluyendo todo tipo de armas.

La Plaza de Armas de la base ‘Gran Capitán’ de Besmayah acogió la ceremonia de graduación, en la que los militares iraquíes recibieron el diploma que acredita que superaron el periodo de adiestramiento antes de partir hacia sus nuevos destinos.

Este acto contó con la presencia de ocho generales del Ejército iraquí, siendo el secretario general del Departamento de Instrucción y Adiestramiento, general de división Mohammad Thamir Yawhar, el encargado de presidir la ceremonia.

Esta presencia, según el Emad, demuestra la importancia que las autoridades iraquíes otorgan al adiestramiento de sus unidades militares y policiales.