Phes es, en palabras de su creadora, "un proyecto que nace de la impotencia, pero sobre todo de las ganas de querer cambiar el mundo y que, a través de la fotografía, ha conseguido recaudar fondos para ayudar a cientos de personas que han huido de una guerra, del hambre o de la violencia".

"Acercamos la fotografía a estas personas que están en un lugar de tránsito. Les hemos proporcionado cámaras desechables para que nos cuenten cómo es un día en su vida, en ese espacio que habitan después de tener que huir de su país y que nada tiene que ver con su verdadero hogar", explicó De Castro.

Además, el libro cuenta con retratos realizados por la propia De Castro "con el fin de ponerle rostro a estas personas que normalmente solo son cifras".

Phes viajó en primer lugar al campo de refugiados de 'Project Elea' en Atenas (Grecia), y luego a Málaga, donde conocieron a personas que habían llegado en patera desde África, además de visitar a la organización 'Nuevo Siglo', que trabaja desde hace 15 años en la frontera sur con mujeres obligadas a prostituirse en España.

A continuación se desplazaron hasta la zona del Kurdistán en Diyarbakir (Turquía), donde estuvieron con la organización 'Shoram-Casra', que atiende a 2.000 refugiados sirios. El último lugar visitado fue Sid (Serbia), donde opera la entidad 'No Name Kitchen', que da de comer cada día a cientos de personas, en su mayoría afganas, que viven en la calle atrapadas en un limbo.

En este proyecto han participado personas de Siria, Turquía, Irak, Afganistán, Irán, Pakistán, Costa de Marfil, Guinea Conakry, Mali, Senegal, España y Rumanía.

Los fondos recaudados con la venta del fotolibro estarán destinados a ayudar a las organizaciones citadas: 'Project Elea', 'Nuevo Siglo', 'Shoram-Casra' y 'No Name Kitchen'.