Salud

La enfermedad por reflujo gastroesofágico, la patología digestiva más frecuente desde los 65 años

MADRID
SERVIMEDIA

La enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) es la patología digestiva más frecuente en la población mayor de 65 años de edad y llega a afectar a más del 20% a partir de los 70, según la monografía ‘Trastornos de la motilidad del tubo digestivo, desde el principio hasta el fin’, realizada por la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG).

Según informó este miércoles la SEGG, en esta monografía, que ha sido presentada en su LX Congreso Nacional, que se celebra estos días en Las Palmas de Gran Canaria, los expertos destacan la importancia de cuidar el aparato digestivo a partir de los 40 años, que es cuando comienzan a producirse cambios en la motilidad digestiva.

La disfagia esofágica y, sobre todo, la enfermedad por reflujo gastroesofágico y sus consecuencias son problemas frecuentes en el anciano. A este respecto, el vicepresidente de la SEGG y coordinador de la monografía, el doctor Carlos Verdejo, explicó que “aunque hay muchos factores que pueden contribuir a ello, en especial los fármacos y algunas enfermedades, determinados cambios que ocurren con el envejecimiento hacen a las personas mayores más vulnerables a estos problemas”.

De hecho, a partir de los 40 se pueden observar cambios en la peristalsis y un deterioro progresivo de la contractilidad y de la función esfinteriana, así como cambios modestos en la presión esofágica y el retraso del vaciado gástrico. La ERGE tiene un impacto directo en la calidad de vida, sobre todo en las personas mayores, pues tienen más posibilidades de sufrir otras enfermedades o están siguiendo algún tratamiento farmacológico, muchas veces de forma indefinida.

“Así, la llamada incompetencia del esfínter esofágico inferior es más frecuente en mayores de 65 años, posiblemente influida por la ingesta de medicación propia de esa edad, como antihipertensivos, vasodilatadores, broncodilatadores o antidepresivos”, señaló el doctor Verdejo.

Por otro lado, existe también una disminución de la capacidad del esófago para eliminar el material refluido del estómago, debido a los trastornos de la motilidad esofágica y al descenso en la producción de saliva y de bicarbonato habituales en mayores.

Por ello, el vicepresidente de la SEGG aconsejó adoptar ciertas medidas higiénico-dietéticas para evitar complicaciones. “Deberán eliminar el tabaco, elevar la cabecera de la cama, evitar acostarse inmediatamente después de ingerir alimentos durante, al menos, tres horas, perder peso si existe obesidad y evitar comidas copiosas o muy condimentadas, entre otras”, indicó.

(SERVIMEDIA)
13 Jun 2018
ABG/caa