Medio ambiente

Prohibir el aceite de palma no detendría la pérdida global de biodiversidad, según la UICN

- Esta organización medioambiental afirma que “está aquí para quedarse”

MADRID
SERVIMEDIA

La prohibición del aceite de palma probablemente incrementaría la producción de otros cultivos oleaginosos para satisfacer la demanda de aceite, con lo que desplazaría y no detendría las significativas pérdidas de biodiversidad global causadas por el aceite de palma.

Ésta es la principal conclusión del informe ‘Aceite de palma y biodiversidad’, hecho público este martes y elaborado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), que es una organización medioambiental formada por Estados, agencias gubernamentales y ONG.

El informe ese un análisis objetivo de los impactos del aceite de palma en la biodiversidad mundial y las posibles soluciones. Dado que otros cultivos oleaginosos requieren hasta nueve veces más tierra para producir que el aceite de palma, el reemplazo de éste aumentaría significativamente la superficie total utilizada para la producción de aceite vegetal y satisfacer así la demanda planetaria. Evitar seguir deforestando para producir aceite de palma aportaría más beneficios para la biodiversidad.

“Cuando se consideran los impactos desastrosos del aceite de palma en la biodiversidad desde una perspectiva global, no hay soluciones simples”, apuntó la directora general de la UICN, Inger Andersen, quien añade: “La mitad de la población mundial usa aceite de palma en los alimentos y si lo prohibimos o lo boicoteamos, lo más posible es que sea remplazado por otros aceites vegetales que requieren más tierra”.

Andersen comentó que “el aceite de palma está aquí para quedarse y necesitamos urgentemente acciones concertadas para hacer que la producción de aceite de palma sea más sostenible, asegurando que todas las partes –gobiernos, productores y la cadena de suministro- cumplan con sus compromisos de sostenibilidad”.

193 ESPECIES AMENAZADAS

El informe muestra que el aceite de palma está afectando la biodiversidad mundial, incluyendo 193 especies consideradas como amenazadas según la Lista Roja de la UICN, y entre las que más daño han sufrido están los orangutanes, los gibones y los tigres.

Los impactos del aceite de palma sobre la biodiversidad se concentran actualmente en Malasia e Indonesia, pero podrían extenderse por los trópicos de África y América conforme la producción aumente para satisfacer la demanda, según indica el informe.

La UICN apunta que el hecho de que el aceite de palma se cultive en los trópicos, tan ricos en especies, podría tener “efectos catastróficos” sobre la biodiversidad mundial. Las áreas hacia las que podría extenderse la producción de palma aceitera albergan el 54% de todos los mamíferos amenazados del mundo y el 64% de las aves amenazadas. Remplazar el aceite de palma por otros cultivos aceiteros podría desplazar el daño hacia ecosistemas como los bosques tropicales y sabanas de América del Sur.

La palma produce un 35% del aceite vegetal del mundo en menos de un 10% de la tierra asignada a los cultivos oleaginosos y la mayor parte del aceite de palma se consume en India, China e Indonesia. Tres cuartas partes se utilizan para alimentos, como aceite de cocina y en alimentos procesados, y el resto se emplea en cosméticos, productos de limpieza y biocombustibles.

Los autores del informe usaron datos satelitales para calcular el área total plantada en unos 18,7 millones de hectáreas solamente para el aceite industrial de palma, lo que se eleva a 25 millones de hectáreas cuando se incluyen plantaciones de pequeños agricultores. Esto es más que los 21 millones de hectáreas que reportan los países productores para todo su aceite de palma.

“El aceite de palma está diezmando la gran diversidad de especies del sureste asiático, conforme se va tragando grandes extensiones de bosques tropicales. Pero si lo remplazamos por cultivos de colza, soja o girasol, podrían sufrir otros ecosistemas naturales y otras especies. Para poner fin a la destrucción, debemos esforzarnos por producir aceite de palma libre de deforestación y asegurarnos que todos los esfuerzos para limitar el uso de aceite de palma cuenten con información científica sólida y confiable para entender las consecuencias,” apuntó Erik Meijaard, autor principal del informe y presidente del grupo de trabajo de la UICN sobre aceite de palma.

SOLUCIONES

El informe indica que las soluciones deben enfocarse hacia la planificación de nuevas plantaciones de palma aceitera que no requieran talar bosques tropicales o áreas de turberas, así como una mejor gestión de los parches de bosques intactos entre plantaciones, conocidos como tierras reservadas.

Hasta ahora, el aceite de palma certificado ha demostrado ser marginalmente mejor para evitar la deforestación que su equivalente no certificado, pero este enfoque es relativamente nuevo y podría potencialmente mejorar la sostenibilidad.

Por tanto, se necesitan más esfuerzos para garantizar que se cumplan los compromisos de sostenibilidad y que se reporten en forma transparente, así como para asegurar que sigue habiendo demanda para aceite de palma certificado.

Los autores del informe recomiendan que las políticas gubernamentales protejan los bosques en los países que producen aceite de palma, así como otros tipos de aceite, y que limiten la demanda de aceite de palma para usos no comestibles, como los biocombustibles. Una mejor conciencia del consumidor en los principales países consumidores (India, China e Indonesia) podría aumentar en gran medida la demanda de aceite de palma certificado.

(SERVIMEDIA)
26 Jun 2018
MGR/caa