Los pantanos almacenan actualmente 38.935 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, lo que supone 668 menos en la última semana, cuando la precipitación máxima se produjo en Burgos, donde se recogieron 35,8 litros por metro cuadrado, según datos dados a conocer este martes por el Ministerio para la Transición Ecológica.

Pese a ese descenso, el tercero semanal consecutivo después de que los embalses fueran ganando agua semana a semana desde mediados del pasado febrero, la reserva hidráulica actual está un 3,7% por encima de la media de la última década en esta época del año y es la más elevada desde 2014, cuando la reserva nacional estaba al 77,5%. Después, cayó al 68,7% en 2015; al 69,0% en 2016, y al 51,4% en 2017.

Los niveles más altos de agua embalsada en la actualidad corresponden Cantábrico Occidental (94,2%); el Cantábrico Oriental (91,8%); las cuencas internas de Cataluña (90,7%); las cuencas internas del País Vasco (90,5%); Tinto, Odiel y Piedras (89,1%); Galicia Costa (88,3%); el Ebro (88,1%), y el Miño-Sil (81,4%).

Les siguen el Duero (78,5%), el Guadalete-Barbate (71,4%), el Tajo (69,5%), el Guadalquivir (63,2%), el Guadiana (61,4%) y la cuenca mediterránea andaluza (61,8%). Sólo siguen por debajo del 50% las cuencas hidrográficas del Segura (29,4%) y la del Júcar (34,0%).