Salud

La Asociación Nacional de Personas Obesas exige una ratio de ambulancias adaptadas por habitante para evitar casos como el de Manises

- También solicita campañas de sensibilización y concienciación entre los profesionales sanitarios

Madrid
SERVIMEDIA

La Asociación Nacional de Personas Obesas (Asepo) exigió este jueves el establecimiento de una ratio de ambulancias adaptadas por habitante para evitar casos como el de Teófilo Rodríguez, el joven con obesidad mórbida que tuvo que ser trasladado en un camión desde el Hospital de Manises, según denunció su familia.

Un recurso que, según confirmó a Servimedia el presidente de esta asociación, Jesús Javier Díaz, sería útil “no solamente para una persona con obesidad ante una emergencia sanitaria, sino también para aquellas con movilidad reducida, muchas de ellas, casualmente, obesas”.

Se trata, agregó, de vehículos que pueden trasladar camillas especiales para soportar el peso de estos pacientes y que deben estar dotados con más personal, “porque, habitualmente, para realizar estos traslados es necesario llamar a los bomberos, que tienen arneses y grúas”, denunció.

Tras añadir que no considera que el personal técnico sanitario este “preparado” para atender estas emergencias, Díaz también demandó un “protocolo especial” en este sentido así como un “giro” en la forma de concebir las campañas de concienciación, ya que, hasta ahora, “no están consiguiendo nada porque el número de obesos no deja de crecer”.

Asimismo, se quejó de que en atención primaria la obesidad no se reconozca como patología y, como consecuencia de ello, no se derive a los pacientes al especialista, lo que, advirtió, “permitiría evitar muchas dolencias”.

En este punto, abogó por realizar también “campañas de sensibilización y reciclaje entre los facultativos, entre los que tampoco existe un consenso acerca de la obesidad”, una “pandemia mundial” que, criticó, “no se quiere reconocer” y que lleva aparejada “un factor social y psicológico que afecta mucho y tampoco se atiende correctamente”.

Díaz aseveró que se trata de una enfermedad crónica que no tiene cura y que la cirugía bariátrica “solo mejora la calidad de vida del paciente, que es una bomba de relojería, pero le obliga a cuidarse el resto de su vida”.

El presidente de Asepo aconseja a los pacientes en esta situación que, ante un “caso grave” como el de Manises, interpongan una reclamación en el centro sanitario, pero también les recomienda que acudan "siempre al juzgado de guardia, porque, si no no sirve para nada”.

Por su parte, el portavoz de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública, Marciano Sánchez, admitió que el del joven valenciano es “un caso complejo”, aunque, a su entender, “parece claro que el hospital ha intentado quitarse de en medio este problema porque su rentabilidad económica es escasa y no interesa atenderlo”.

Sánchez lamentó la "tendencia" que observa en este tipo de centros hospitalarios de gestión privada, que pretenden “especializarse en atender aquellas patologías más sencillas y que tienen menos complicaciones y, por lo tanto, menores costes económicos”.

A este respecto, instó a clausurar el Modelo Alzira para "acabar" con estos centros de gestión privada y financiación pública, dado que, según él, “en realidad, no solventan los problemas y, cuando se encuentran con uno que les resulta muy poco rentable, intentan siempre trasladarlo a un centro público”.

(SERVIMEDIA)
16 Ago 2018
MJR/bpp