Aumenta más de un 3% la obesidad entre los jóvenes españoles
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El estudio ENPE sobre la prevalencia de obesidad infantil y juvenil en España, coordinado por el doctor Javier Aranceta, de la Universidad de Navarra, concluye que la obesidad juvenil "ha aumentado entre un tres y un cinco por ciento en función del grupo de edad. La obesidad en el grupo de niños entre 13 y 25 años sigue su progreso, aunque tiende a estabilizarse".
Aranceta presentó este estudio transversal, realizado en una muestra aleatoria de la población infantil y juvenil española, en el marco del IV World Congress of Public Health Nutrition, que se celebra en Madrid.
"Desde el año 2.000 la prevalencia de obesidad en menores de 25 años ha aumentado tanto en chicos como en chicas, aunque hay grupos de población de clase media alta, sobre todo chicas en edad intermedia, en que la prevalencia de obesidad ha disminuido. En concreto, la prevalencia media es del 11,3, pero en varones llega al 12,6, mientras que en las chicas se queda en el 11,2", agregó el doctor Aranceta.
Destacó el director de este estudio que "la crisis ha incidido de forma negativa en el aumento de la obesidad. Es obvio que los alimentos con alta densidad energética y poco valor nutricional son baratos" y por eso los consumen las personas con menos recursos y puso el acento "en los jóvenes que viven en entornos más modestos".
Por esto, reivindicó el valor de la dieta mediterránea, que "es una dieta de subsistencia, barata, que permitió llegar a nuestros antepasados hasta aquí", y recomendó volver a ella. "Es fundamental que las familias sepan elegir y organizar la alimentación familiar de forma saludable y con recursos más modestos", agregó, para prevenir la obesidad infantil, que evitará también adultos con enfermedades crónicas como la diabetes.
Asimismo, el doctor Aranceta dijo que aunque cuidar la alimentación es "muy importante, también lo es la actividad física entre niños. La adherencia a la pantalla, estar más de dos horas ante una pantalla, es un factor de riesgo importante, porque nadie come fruta jugando a un videojuego de acción. Una hora de ejercicio al día, o tres de deporte escolar a la semana", deben ser las pautas que tienen que interiorizar los niños en la infancia para no ser obesos. "No tenemos que tener a nuestros niños a dieta, sino alimentarles bien", manifestó Aranceta.
Por último, puso de manifiesto que los peores datos de obesidad infantil y juvenil se dan en Canarias y en Andalucía y que "si nos comparamos con Europa, estamos mejor que en Gran Bretaña o que en algunas zonas del antiguo telón de acero, pero peor que en el norte de Europa".
En este sentido, explicó que la grasa parda es más fácil de eliminar en los países del norte, "porque el frío hace que se elimine más".
El IV World Congress of Public Health Nutrition cuenta con la presencia de más de 500 científicos y profesionales de la salud de 18 países, que durante cuatro días debatirán en Madrid sobre la dieta mediterránea, la nutrigenómica y las dietas sostenibles.
(SERVIMEDIA)
25 Oct 2018
MAN/caa