Fuentes de ambas entidades aseguraron a Servimedia que se ha producido un goteo constante de pequeñas aportaciones, la mayoría de ellas hechas por particulares, desde el pasado viernes, momento en el que se abrieron estas cuentas.

El BBVA destinará el dinero recaudado en esta cuenta a un fondo para ayudar en sus estudios a los hijos de las víctimas, junto con los 50.000 euros donados por la entidad. Los donativos son mayoritariamente de entre 30 y 50 euros.

Por su parte, el dinero recaudado por "la Caixa" se destinará a un fondo abierto por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), bajo el nombre de "Donativos Víctimas 11-M".

Según explicaron fuentes de la CECA a Servimedia, las 46 cajas de ahorros que forman parte de la organización abrieron una cuenta corriente propia, que posteriormente se unirán en este depósito y que también está registrand aportaciones continuas de los ciudadanos.